La presión sobre los centros oncológicos ha hecho necesario concienciar a la población sobre los signos de una posible enfermedad. Según las autoridades sanitarias, muchos pacientes con cáncer de pulmón han notado cambios en sus rostros.
El sitio web Reynolds Cancer Support House publicó un artículo que habla sobre los síntomas del cáncer a los que las mujeres "la mayoría de las veces no les prestan atención".
"Algunos pacientes con cáncer de pulmón reportan hinchazón, hinchazón o enrojecimiento en la cara", dijo el Centro de Cáncer.
Esto se debe a que un tumor canceroso, que está formado por células pequeñas, generalmente bloquea los vasos sanguíneos en el área del tórax, impidiendo el libre flujo de sangre de la cabeza y la cara".
Estos cambios se consideran un "síntoma común" del carcinoma de pulmón, pero también pueden estar asociados con otros tipos de cáncer. Por ejemplo, podemos hablar de un tumor carcinoide, es decir, un tumor neuroendocrino que crece en células neuroendocrinas.
Estas células son responsables de la señalización mediante la liberación de hormonas que ayudan al funcionamiento del cuerpo. Cuando las células se vuelven cancerosas, se presentan síntomas como fiebre, enrojecimiento facial y sibilancias o sibilancias.
Los estudios muestran que el enrojecimiento de la cara aparece como resultado del síndrome cardinoide, causado por la liberación de demasiadas sustancias similares a las hormonas en la sangre. El carcinoma de células escamosas es un cáncer de piel conocido por cambiar la apariencia de la cara. Los cambios a menudo ocurren en las áreas de la cara que están más expuestas al sol.
El cáncer de pulmón causa hinchazón de la cara, principalmente porque el tumor presiona una vena que va desde la cabeza hasta el corazón. La obstrucción ralentiza la circulación de la sangre desde y hacia la cabeza y provoca hinchazón en el cuello y la cara.
Los estudios han demostrado que estos cambios afectan significativamente el estado psicológico del paciente. Cuando aparecen cambios repentinos, es importante buscar ayuda de un especialista. El cribado ayuda a detectar tumores malignos en las primeras etapas.
Es necesario evitar la exposición a radiaciones, tóxicos industriales y naturales, las infecciones y abstenerse de fumar. El ejercicio físico y una nutrición adecuada son igualmente importantes para la prevención del cáncer porque ayudan a mantener el cuerpo en forma.
No existen muchos estudios que demuestren la relación entre el cáncer y el sueño, pero la calidad del sueño debe ser una prioridad.
“Dormir mal y la falta de sueño están asociados con el aumento de peso, y este es un factor clave en el desarrollo del cáncer”, señala el portal Harvard Health. Finalmente, la vitamina D en cantidades suficientes puede proteger hasta cierto punto contra varios tipos de cáncer, incluidos el cáncer de próstata y de colon.