El sureste del Canadá ha sido azotado por una fuerte tormenta durante el fin de semana. La zona afectada se localiza en el sur de la provincia de Ontario. Las fuertes lluvias se han cobrado la vida de al menos 7 personas, recoge el medio CTV.
Asimismo, el mal tiempo ha causado el derribo de múltiples árboles y ha dañado la infraestructura eléctrica, y como consecuencia más de 350.000 personas se han quedado sin energía desde el sábado, señaló Hydro One, la empresa proveedora del servicio.