EEUU desencadena un desastre en Ucrania con provocaciones

La embajada de Rusia en EE.UU. ha reaccionado a un reciente artículo escrito por Bonnie Jenkins, la subsecretaria de Estado de EE.UU. para Control de Armamento y Seguridad Internacional, con motivo del 25.º aniversario de la entrada en vigor de la Convención sobre las Armas Químicas (CAQ).
En el documento publicado el viernes en la revista estadounidense Newsweek, Jenkins afirma que el aniversario se celebra, bajo la sombra de que Rusia podría usar este tipo de armas en el territorio ucraniano, que es escenario de una operación militar rusa desde el 24 de febrero.
No obstante, en un mensaje divulgado el sábado en Facebook, la embajada rusa describió estos comentarios como “acusaciones infundadas” lamentando que a Moscú “una vez más se le atribuya injustificadamente la presencia de armas químicas no declaradas y su uso”.
Conforme denuncia la misión diplomática rusa, Moscú tiene información “irrefutable” de que Washington está preparando “provocaciones para acusar a las fuerzas rusas de utilizar armas de destrucción masiva en Ucrania”.
La embajada rusa también instó a EE.UU. a reconsiderar tales acusaciones pidiéndole que “renuncie a las provocaciones que pueden desatar la muerte de decenas de miles de ciudadanos ucranianos y causar un desastre ecológico y humanitario”.
Washington realiza tales acusaciones contra Moscú, mientras que en marzo pasado datos publicados por la Defensa rusa revelaron que el propio país norteamericano está fabricando armas de destrucción masiva en el territorio ucraniano con la intención de debilitar la seguridad rusa.
Es más, Rusia advierte que Ucrania está desarrollando su programa nuclear con la posible ayuda de Estados Unidos para fabricar armas atómicas, lo que podría desencadenar una guerra nuclear.