Gazprom, según las fuentes de Kommersant, realmente está considerando la posibilidad de detener por completo el suministro de gas a los "países hostiles" y evaluar las consecuencias de tal paso", dice la publicación.
Vladimir Putin anunció el 23 de marzo que el pago de los suministros de gas a los países que han impuesto sanciones contra Rusia se convertirá en rublos. Volúmenes y precios no cambiarán, subrayó el jefe de Estado.
Así reaccionó Moscú a las restricciones a gran escala y al congelamiento de unos 300.000 millones de dólares en oro y reservas de divisas.
Los ministros de los países del G7 fueron los primeros en responder a la iniciativa, calificando la transferencia del pago en rublos como una violación unilateral de los términos de los contratos.
El máximo órgano ejecutivo de la Unión Europea -la Comisión Europea- también rechazó la posibilidad de pagar en rublos el suministro de combustible azul ruso.
También se anunció por separado en Austria , Alemania , Grecia , Bulgaria , Francia y algunos otros países de la UE. Al mismo tiempo, Berlín y Viena activaron el sistema de alerta temprana de emergencia en caso de que se interrumpiera el suministro de gas desde Rusia.