Mat 7:13 Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella;
Mat 7:14 porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan.
Es cada día más difícil predicar el evangelio, las buenas nuevas de salvación, porque hay menos y menos que creen en Dios. O, si dicen que creen, por lo menos no tienen conocimiento ni convicciones claras.
Básicamente ignoran el contenido de la Biblia, o su comprensión es superficial. Al mismo tiempo, el nivel de sufrimiento, descontentamiento e insatisfacción incrementa constantemente. La humanidad nunca fue diseñada para existir en independencia de su Creador, y sin Dios se autodestruye en esta vida, además de perecer eternamente sin Él.
Es que Él nos ama, y sus consejos y Palabra son para nuestro beneficio, bienestar y bienaventuranza. Cuando el hombre da su espalda a Dios, y rehúsa el conocimiento de Él, el resultado sólo puede ser la degeneración, degradación y depravación a todo nivel: personal, de la familia y de la sociedad en general. Si sólo se volvieran a Él, para buscar su sabiduría en las Escrituras, y la salvación en su Hijo, experimentarían la bendición de vida en armonía con su Dios.
Dios es bueno
Mat 7:11 Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará buenas cosas a los que le pidan?
Este es el contexto de la imprescindible recomendación de los labios del Salvador que ya leímos en Mateo 7:13-14. Sus palabras sirven como un mapa caminero, pero no en lo geográfico, sino en lo espiritual. Señalan la posición, el rumbo y el destino eterno de cada ser humano.
Responde a las grandes incógnitas:
¿Dónde estoy con respecto a Dios?
¿Hacia dónde voy?
¿Cuál será mi destino eterno?
Te invito a enfrentar con honestidad estas preguntas; son preguntas que todos tenemos pero que pocos tienen la valentía de enfrentar. Pero te animo, porque Dios te ama, y su Palabra, la Biblia, es el gran libro de revelación con respecto a estas verdades eternas. Vamos a ver las respuestas bíblicas, además de indicaciones acertadas acerca de cómo puedes ser salvo, y saber a ciencia cierta que tu destino será el cielo, junto con el Señor.
El gráfico
Fíjese en el gráfico las divisiones demarcadas en el borde superior y en el borde derecho.
(i) Cronología (señalada por el borde superior): El presente incluye nuestro tiempo hasta el prometido retorno de Cristo para buscar a los creyentes. Incluye la resurrección de por lo menos los creyentes fallecidos de esta época de la Iglesia. El tiempo futuro va desde el regreso de Cristo para la Iglesia hasta la eternidad.
(ii) Esferas (señaladas por el borde derecho):
celestial, eventos en el cielo
terrenal, eventos en la tierra
infernal, eventos en los lugares infernales
El texto lema
Volviendo a Mat_7:13-14, llaman la atención los pares de cosas en el texto. Estos pares definen con mucha precisión las posiciones y condiciones espirituales que no admiten un término medio.
puerta estrecha puerta ancha
camino angosto camino espacioso
vida perdición
pocos muchos
Un camino sirve para llevarnos a un destino. En el gráfico, el camino angosto nos lleva al cielo (“la vida”), y el camino espacioso, o ancho, desemboca en el infierno (“la perdición”). Luego comparamos a los “pocos” y los “muchos”, ¡y observamos que son los pocos que se salvan!
Podemos apreciar la tremenda importancia de este tema que nos plantea el Señor Jesús.
¿Qué es lo que le motivaría al Señor a revelarnos esta información? La respuesta es que Él nos ama, y desea nuestra salvación y felicidad eterna. Realmente nos insta a que hagamos las siguientes preguntas. Él desea despertarnos a la realidad.
¿Te has equivocado de camino alguna vez? ¿Sabes dónde estás ahora?
¿Cuál es tu posición espiritual? ¿En cuál camino estás?
¿Sabes adónde vas? Si sigues tu camino actual, ¿cuál será tu destino eterno: el cielo o el infierno?
¿Estás conforme con tu destino? ¿Qué sería conveniente que hicieras?
Tú estás en este gráfico
No has muerto todavía, así que estás antes de la columna MUERTE. Estás viajando, o por el camino angosto por haber entrado por la puerta estrecha, o estás todavía en el camino espacioso yendo hacia abajo. Realmente, todo ser humano en el mundo está incluido aquí: “los pocos” van hacia la vida, mientras “los muchos” van hacia la perdición. Si sumáramos a “los pocos” y “los muchos”, tendríamos a todos. ¿Dónde estás tú?