De acuerdo con un artículo de The Washington Post, existe "una sensación de desesperación en los pasillos del poder de Ucrania" y las autoridades de Kiev mantienen su súplica a los socios de Occidente para que les entreguen más armas y financiamiento.
El diario estadounidense recuerda que el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, recorrió las capitales occidentales a finales del año pasado, suplicando apoyo, sin buenos resultados, mientras su general de más alto rango, Valeri Zaluzhni, lamentó el "estancamiento" en el que se había sumido el país después de que la tan esperada contraofensiva ucraniana de 2023 resultó un fracaso.
Además, funcionarios estadounidenses, y occidentales en general, prevén que 2024 sea un año de poco presupuesto para ayudar a Ucrania, por lo que ese país tendría que centrarse más en consolidar su defensa que en recuperar zonas ganadas por Rusia como parte de su operación especial, detalla el diario.
En el frente, agrega el diario, los informes indican que las existencias de munición y proyectiles de artillería se están agotando en muchas unidades ucranianas.
El medio también destaca que mientras Ucrania la está pasando mal por la falta del apoyo que se le había prometido y por un avance casi nulo en el campo de batalla, Rusia se ha mantenido firme.
"Ha resistido las sanciones internacionales y se prepara para nuevas ofensivas en Ucrania", concluye The Washington Post.
El Ministerio de Defensa de Rusia ha detallado que las Fuerzas Armadas de Ucrania perdieron en 2023 más de 215.000 efectivos, entre muertos y heridos. En total, desde el comienzo de la operación especial han sido destruidos 568 aviones militares ucranianos, 265 helicópteros, 11.311 drones, 456 sistemas de misiles antiaéreos,14.814 tanques y otros vehículos blindados de combate.
Igualmente, según la dependencia rusa, fueron eliminados 1.211 vehículos de sistemas de lanzacohetes múltiples, 7.887 cañones de artillería de campaña y morteros, así como 17.990 vehículos militares especiales.