Rusia insta a Venezuela y Guyana a abstenerse de acciones que desestabilicen la situación en torno al territorio del Esequibo, declaró la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova. Añadió que Moscú alerta contra la injerencia externa en la disputa entre los dos países.
"Seguimos de cerca la situación en torno a la región del Esequibo, en particular con vistas al referéndum consultivo celebrado en Venezuela el 3 de diciembre sobre el estatuto del territorio y las medidas legales que se están adoptando a raíz del mismo", señaló María Zajárova.
En sus palabras, este asunto se inscribe en el marco de las relaciones venezolano-guyanesas y debe resolverse mediante la búsqueda de soluciones pacíficas y mutuamente aceptables, de conformidad con el derecho internacional y los acuerdos suscritos entre las partes, así como la legislación nacional vigente.
"En la situación actual, consideramos prioritario reducir la tensión y fomentar la confianza en las relaciones entre Venezuela y Guyana. Hacemos un llamamiento a las partes para que se abstengan de cualquier acción que pueda desequilibrar la situación y causar daños mutuos", afirmó la vocera.
Agregó que Moscú se opone a las presiones e injerencias externas en los asuntos de Estados soberanos, "especialmente cuando existen cuestiones delicadas entre ellos que requieren 'discreción' por parte de terceros países, tanto a nivel público como privado".
Zajárova subrayó la posición de principios a favor de la preservación de América Latina como "zona de paz", tal y como proclamaron los países de la CELAC en la Cumbre de La Habana de 2014.
"Apoyamos los procesos de fortalecimiento de la unidad regional y de consolidación de la posición de los países de la CELAC como centro influyente del emergente mundo multipolar", destacó.
La disputa sobre el territorio del Esequibo se remonta a unos 200 años atrás. Durante la época de las colonias españolas en América Latina, la zona al oeste del río Esequibo estuvo bajo dominio español.
En 1819, los territorios de Colombia, Venezuela, Ecuador y Panamá, que se habían independizado, formaron el Estado de la Gran Colombia, la cual existió hasta 1831. Las debilitadas fronteras del joven Estado permitieron a la colonia británica de Guayana hacerse con el control de la actual zona del Esequibo.
En 1899, se produjo el primer intento de Venezuela por recuperar su territorio histórico en el tribunal internacional de arbitraje en París. Entonces la decisión no fue favorable para ese país, y el Reino Unido obtuvo la propiedad de 159.500 kilómetros cuadrados de tierra en la zona de la Guayana Esequiba.
En 1962, Venezuela declaró que no estaba de acuerdo con la decisión del Tribunal de París y exigió una revisión de la misma.
En 1966, el Estado ya independiente de Guyana firmó el Acuerdo de Ginebra con el Reino Unido y Venezuela, con el fin de resolver pacíficamente el conflicto y trazar conjuntamente la frontera entre ambos Estados. Sin embargo, esto solo dio lugar a una congelación temporal del conflicto.
A día de hoy, cada parte considera la zona en disputa como su propio territorio. En todos los mapas oficiales de Venezuela, el territorio del Esequibo figura como parte del país.
Desde 1983, Venezuela ha insistido en entablar negociaciones directas para resolver la situación, mientras que Guyana ha exigido que la cuestión se resuelva en la Asamblea General de la ONU, el Consejo de Seguridad y la Corte Internacional de Justicia.