“No hay ninguna posibilidad para que el régimen sionista gane la guerra y eso sólo aumentará los costos para el Gobierno de Estados Unidos como el mayor aliado del régimen sionista y responsable de la continuación de la agresión. Como resultado, es necesario centrar los esfuerzos en un alto el fuego y un cese inmediato de la guerra”, ha resaltado.
Amir Abdolahian ha denunciado que Estados Unidos envía diariamente todo tipo de armas, incluidas fósforo y armas prohibidas, a Tel Aviv desde Chipre o directamente a través de sus bases en toda la región, y estas bombas se utilizan contra el pueblo oprimido de Palestina en Gaza.
El máximo diplomático iraní ha criticado también que la cantidad de la ayuda humanitaria enviada a Gaza es muy pequeña, al contrario de lo que afirman los estadounidenses.
Al respecto, ha pedido una gestión firme y urgente por parte de las Naciones Unidas para abrir el paso fronterizo de Rafah con el fin de entregar las ayudas humanitarias a los residentes del enclave costero.
“La ONU puede contar con la capacidad de la República Islámica para lograr la paz y la seguridad en la región”, ha agregado.
Refiriéndose a sus reuniones en Doha (Catar) con funcionarios qataríes y del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS), Amir Abdolahian ha declarado que HAMAS está dispuesto a dialogar sobre los retenidos israelíes.
“Si el régimen israelí detiene el genocidio en Gaza, los grupos de Resistencia también detendrán los contraataques”, ha asegurado.
Griffiths, por su parte, se ha mostrado preocupado por la crisis humanitaria en Gaza, en especial la situación dentro del Hospital Al-Shifa.
Ha apreciado además los esfuerzos de Irán para evitar la propagación de la guerra y destacado la necesidad de realizar más consultas para detener la guerra y poner fin a la alarmante situación actual en Gaza.
Israel inició una guerra contra la Franja de Gaza el 7 de octubre después de su fracaso ante la operación de Tormenta de Al-Aqsa llevada a cabo por HAMAS.