Las Fuerzas Aéreas estadounidenses publicaron la semana pasada en el Servicio de Distribución de Información Visual de Defensa las nuevas fotos de su primer bombardero furtivo estratégico B-21 Raider, mostrándolo desde ángulos nunca vistos.
De acuerdo con el comunicado oficial, el Raider va a sustituir los modelos B-1 Lancer y B-2 Spirit cuando se disponga de un número suficiente de nuevos bombarderos. "El bombardero de última generación proporcionará capacidades de ataque penetrante, de largo alcance y con capacidad de supervivencia para disuadir agresiones y proteger a Estados Unidos, sus aliados y socios", indica.
Además, anunciaron que el primer vuelo del B-21 se realizará en 2023. Se informa también que el bombardero, que está siendo desarrollado por Northrop Grumman, es capaz de transportar tanto cabezas convencionales como nucleares. Asimismo, el coste medio unitario de adquisición será de 692 millones de dólares (del año base 2022).
Entre sus características principales figuran sistemas de inteligencia, vigilancia, reconocimiento y comunicaciones, así como capacidades para realizar ataques electrónicos y operaciones tripuladas o no tripuladas.
Anteriormente, se reportó que el Raider será incorporado al equipamiento del Ejército de EE.UU. como un "activo utilizable" alrededor de 2025. El primer avión de este programa fue presentado al público en diciembre de 2022, pero hasta el momento no se ha llevado a cabo ninguna prueba del motor ni del fuselaje.