El presidente de Rusia, Vladímir Putin, introdujo la ley marcial en las nuevas regiones rusas de Donetsk (RPD), Lugansk (RPL), Jersón y Zaporozhie.
"He firmado un decreto sobre la introducción de la ley marcial en estos cuatro sujetos de la Federación de Rusia [regiones de la RPL, RPD, Zaporozhie y Jersón]. Se enviará inmediatamente al Consejo de la Federación para su aprobación y se informará a la Duma Estatal de la decisión", comunicó durante una reunión del Consejo de Seguridad por videoconferencia.
La ley entrará en vigor el 20 de octubre.
Putin también ordenó establecer planas mayores de la defensa territorial y declaró alerta roja de seguridad en estas regiones.
Putin también introdujo un nivel de respuesta medio en las regiones fronterizas con Ucrania y con los nuevos territorios: Crimea, Sebastopol, las regiones de Krasnodar, Bélgorod, Briansk, Vorónezh, Kursk y Rostov, mientras que en otras regiones del centro y sur del país se declaró el nivel de preparación elevado.
Según el decreto firmado por el presidente, otras regiones rusas están en "preparación básica".
La defensa territorial y los correspondientes cuarteles interdepartamentales se desplegarán en las regiones de Lugansk, Donetsk, Zaporozhie y Jersón, indica el documento.
El presidente ruso destacó que los gobernantes "deben prestar la atención necesaria a la aplicación de medidas destinadas a garantizar la seguridad de las personas, la seguridad y la protección antiterrorista de las instalaciones críticas, el mantenimiento del orden público, el aumento de la sostenibilidad de la economía, la industria y a establecer y ampliar la producción de productos necesarios para la operación militar especial".
Anteriormente, fuentes habían informado que durante la reunión con el Consejo de Seguridad de Rusia se debatirían cuestiones relacionadas con la migración de ciudadanos.
La región rusa de Bélgorod fue bombardeada repetidamente por parte de Ucrania, y desde el 11 de abril está vigente en toda la región un nivel amarillo elevado de peligro terrorista.
El 24 de febrero de 2022, Putin anunció el inicio de una operación militar especial para desmilitarizar y desnazificar Ucrania. El 30 de septiembre firmó los acuerdos de incorporación de las repúblicas de Donetsk y Lugansk, así como las provincias de Jersón y Zaporozhie a Rusia, tras los referendos que estos territorios celebraron del 23 al 27 de septiembre, y en los que el 'sí' a la unión ganó por mayoría abrumadora.
El 21 septiembre, en una alocución televisada a la nación, Putin anunció la movilización parcial de los reservistas que, según el Ministerio de Defensa, engloba a 300.000 personas y es necesaria para controlar los territorios liberados en Donbás.