"El Ministerio de Defensa de la Federación de Rusia dispone de las pruebas de que el régimen de Kiev está preparando una provocación con el uso de una llamada bomba sucia", anunció el jefe de las Tropas de Defensa Radiológica, Química y Biológica de las Fuerzas Armadas rusas, teniente general Ígor Kirílov.
Según Kirílov, "el objetivo de la provocación es acusar a Rusia de haber utilizado armas de destrucción masiva en el teatro de operaciones ucraniano y poner en marcha así una poderosa campaña antirrusa en el mundo destinada a socavar la confianza en Moscú".
El trabajo para crear esta bomba, continuó, ya está en su fase final.
"La detonación de un artefacto explosivo radiológico llevará inevitablemente a la contaminación radiactiva de un área de hasta varios miles de metros cuadrados", subrayó.
El comandante también denunció que desde el 24 febrero pasado las tropas ucranianas atacaron la planta nuclear de Zaporozhie en 39 ocasiones, algo que podría ocasionar la liberación de sustancias radiactivas como para afectar a toda Europa.
El 23 de octubre, el ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú, expresó a sus homólogos de EEUU, Reino Unido, Francia y Turquía su preocupación con motivo de que Kiev pueda usar una bomba atómica sucia.
Según informan fuentes solventes de diferentes países, incluida la propia Ucrania, el régimen de Kiev está preparando en territorio de su país una provocación con el uso de una bomba atómica "sucia" de baja potencia, para acusar a Rusia de haber empleado un arma de exterminio masivo en el teatro ucraniano de operaciones de combate y lanzar al mundo una ruidosa campaña antirrusa.