Siria asegura que frustrará nuevo plan de EE.UU. a fin de saquear sus riquezas mediante la exención de sanciones para invertir en zonas ocupadas por terroristas.
A través de un comunicado emitido el viernes, el Ministerio de Exteriores de Siria criticó la reciente aprobación de licencias por parte del Departamento de Tesoro de Estados Unidos para llevar a cabo actividades económicas en las zonas del noreste y noroeste del país árabe, donde operan los grupos armados respaldados por Washington.
En la nota ministerial, Damasco pone de relieve que no sorprende la decisión de Washington, puesto que las anteriores Administraciones estadounidenses estuvieron detrás de los diez años de la guerra terrorista contra la República Árabe Siria.
La Cancillería del país levantino precisó que la ayuda de EE.UU. y sus aliados occidentales a las organizaciones terroristas que operan en el noreste y noroeste de Siria ha provocado la destrucción del potencial económico del país y el saqueo de sus riquezas como algodón, petróleo, trigo y antigüedades, además del martirio de muchos ciudadanos inocentes que se negaron a participar en estos planes estadounidense-occidentales.
“La nueva decisión de Washington no es más que la continuación de este enfoque destructivo, que contradice los compromisos internacionales de Estados Unidos con la lucha contra el terrorismo y el respeto a la integridad territorial y la unidad nacional de Siria”, reza el documento.
El Ministerio de Relaciones Exteriores del país árabe aseveró que la meta de EE.UU. y Occidente ha sido dividir Siria, pero la firmeza del Ejército, el pueblo y su liderazgo condujeron al fracaso este despreciable objetivo.
De esta manera, dejó claro que Siria está decidida a derrotar el nuevo complot y todas las fuerzas que lo respaldan, y llama a todo el pueblo residente en el noreste y noroeste del país a hacer frente a esta nueva conspiración.
EE.UU. intervino militarmente en 2014 en el país levantino bajo el pretexto de luchar contra el terrorismo. No obstante, Damasco, que nunca autorizó la presencia del Ejército estadounidense en su territorio, acusa a Washington de robar sus recursos y de buscar renovar la estructura del grupo terrorista Daesh, por lo que exige la salida de las tropas foráneas ilegales del suelo sirio.
Desde 2011, Siria es escenario de conflicto entre el Gobierno sirio, presidido por Bashar al-Asad, y los grupos takfiríes respaldados desde el extranjero. Tras más de once años de conflicto, actualmente, el Ejército sirio controla más del 90 % del suelo del país.