“No descartamos la posibilidad de asesinato o ataque a comandantes y miembros del movimiento de la Yihad Islámica, y nuestra reacción sería bombardear inmediatamente Tel Aviv”, advirtió el miércoles el secretario general de la Yihad Islámica de Palestina, Ziad al-Najala, en una entrevista concedida a la cadena libanesa Al Mayadeen.
Al señalar que es poco probable que el régimen de Tel Aviv lance un ataque contra la Franja de Gaza, debido a sus consecuencias, Al-Najala aseveró que la Resistencia palestina restauró sus capacidades militares después de la reciente operación 'Espada de Al-Quds' de mayo y fortaleció sus armas con industrialización continua.
“Todo lo que perdimos en esta guerra ha sido compensado y ha sido mejorado lo que existe, y estamos listos para que la batalla continúe con la misma actuación y fuerza”, agregó el líder palestino.
En este sentido, consideró defender a la nación palestina como la más importante obligación de la Resistencia, mientras el régimen de Tel Aviv busca que el pueblo se rinda para poder continuar controlando la ocupada Cisjordania y la ciudad de Al-Quds (Jerusalén). Es más, alertó que los israelíes buscan separar la Franja de Gaza de Cisjordania y Al-Quds.
De acuerdo con el líder de la Yihad Islámica, el régimen de Israel considera al enclave costero Gaza como una bomba de tiempo, por lo que busca desactivarla a través de prometer facilitar entrada de mercancías al Gaza.
Sus palabras se produjeron con el motivo del segundo aniversario del martirio de Baha Abu al-Ata, un comandante de alto rango de la Yihad Islámica Palestina, que cayó mártir el 12 de noviembre de 2019 como consecuencia de un ataque aéreo israelí contra su vivienda particular, ubicada en la asediada Franja de Gaza.
La brutal agresión israelí fue respondida en aquel entonces con contundencia por los grupos de la Resistencia palestina que, conforme a las fuentes locales, lanzaron casi 400 cohetes contra los territorios ocupados por Israel.
