Me llaman loco
Me llaman loco…
porque busco las estrellas en la noche,
porque me gusta el invierno cuando pienso
que nos trae la alegre primavera,
porque lanzo mis rosas por el viento,
seguro de que llegarán a alguna parte…
Me llaman loco…
porque sonrío a los ancianos por la calle,
porque corro con los niños cazando mariposas,
y jugando a ser libres y felices,
porque grito con los gritos de los jóvenes
y escribo en mi pancarta que “el amor es lo que importa”.
Me llaman loco…
porque creo que es posible
que esta tierra sea hermosa,
porque digo que los hombres son hermanos,
porque tengo la certeza de que hay vida
en el surco aparentemente muerto,
porque tiendo la mano y me encuentro
con Alguien que es más grande
que el vacío, la noche, el desencanto…
Me llaman loco… ¡No me importa!
Yo seguiré recogiendo amapolas en los campos
cantando salmos a la vida,
llorando cuando un niño se haga daño,
esperando que los hombres sean buenos,
creyendo, trabajando,
amando, dando…
Me llaman loco…
De acuerdo. ¡Yo estoy loco!
Sólo me gustaría tener un compañero.
Alguno de ustedes:
¿se apunta a esta locura?
Tal vez tú ya estés loco…¿Caminamos unidos?