Al menos una persona han muerto y otras ocho han resultado heridas como consecuencia de un ataque a una base militar al sur de Bagdad.
Se produjo al menos cinco explosiones el viernes por un ataque en la base militar Kalsu, en las afueras de la ciudad de Babel, a unos 80 kilómetros al sur de la capital iraquí, y que acoge a miembros de las fuerzas populares de Irak (Al-Hashad Al-Shabi, en árabe), así como a militares y policías iraquíes, según dijo una fuente de seguridad en la oficina del gobernador de Babel.
Al-Hashad Al-Shabi dijo, en un comunicado, que el ataque apuntó su “cuartel general” y admitió que las explosiones “provocaron víctimas y pérdidas materiales”, sin dar a conocer detalles. Fuentes locales aseguran que entre los heridos existen algunos efectivos militares.
El Comando Central de Estados Unidos (Centcom, por sus siglas en inglés) ha rechazado cualquier implicación de las fuerzas estadounidenses en el incidente, mientras que algunas fuentes iraquíes no identificadas han atribuido el ataque al régimen de Israel. “Estados Unidos no ha llevado a cabo ataques aéreos en Irak hoy”, afirmó el Centcom en un comunicado.
A su vez, la milicia iraquí Kataeb Sayed al-Shuhada, que integra Al-Hashad Al-Shabi, ha prometido responder a los autores y responsables del ataque.