Un total de 16 antiguos íconos fueron sacados de un museo ucraniano y llevados a Francia durante una operación secreta que se ejecutó en mayo de 2023, reporta este jueves The Wall Street Journal.
El diario señala que "cinco de los íconos cristianos ortodoxos más raros del mundo" se exhiben ahora en el Museo del Louvre, en París, mientras que 11 más se encuentran en un almacén.
En el marco de la operación secreta, los íconos fueron transportados en contenedores con aire condicionado a través del territorio de Polonia y Alemania. "Nadie más allá de un pequeño círculo sabía que estábamos haciéndolo", dijo Maximilien Durand, director del Departamento de Arte Bizantino y Cristiano Oriental en el Museo del Louvre, agregando que "solo muy pocas personas sabían que estábamos montando esta exhibición".
De acuerdo con The Wall Street Journal, los empleados del Museo Khanenko, en Kiev, empacaron y escondieron unas 25.000 piezas tras el inicio del operativo militar ruso en Ucrania. Entre ellas se encontraban íconos que están ahora en territorio francés, cuatro de ellos se remontan al siglo VI.
El artículo señala que el impacto de proyectiles provocó daños en ventanas, el techo y la fachada del museo.
En junio de 2023, el jefe del Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia, Serguéi Naryshkin, manifestó que se intensifican los esfuerzos "para saquear Ucrania".
Según la Inteligencia Exterior rusa, las autoridades de Kiev y los representantes de la Unesco han llegado a un acuerdo para sacar varios objetos ortodoxos, incluidas reliquias sagradas, del territorio del Monasterio de las Cuevas de Kiev y transferirlos a museos de Italia, Francia, Alemania y el Vaticano bajo el pretexto de protegerlos ante los ataques de los misiles rusos.
"No hay duda de que la devolución de estas reliquias no forma parte de los planes de Occidente y de la junta títere de Kiev", aseveró Naryshkin.