El secretario general de la ONU, António Guterres, se ha dirigido al Consejo de Seguridad del organismo invocando el Artículo 99 de la Carta fundacional para instar a actuar ante la amenaza que presenta el conflicto palestino-israelí para la seguridad internacional.
Se trata de un artículo, que no ha sido invocado en décadas, que establece que "el secretario general podrá señalar a la atención del Consejo de Seguridad cualquier asunto que, a su juicio, pueda amenazar el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales".
En la carta enviada la mañana de este miércoles al presidente del Consejo de Seguridad, José Javier de la Gasca López Domínguez, el secretario general indica que "más de ocho semanas de hostilidades en Gaza e Israel han provocado un sufrimiento humano atroz, destrucción física y trauma colectivo en todo Israel y el territorio palestino ocupado".
António Guterres reiteró su condena al asesinato de las más de 1.200 personas, incluidos 33 niños, y a las lesiones infligidas a miles más "en los aborrecibles actos de terror cometidos por Hamás y otros grupos armados palestinos el 7 de octubre de 2023". Recordó que unas 250 personas fueron secuestradas, de ellas más de 130 siguen en cautiverio, y subrayó que "deben ser liberadas inmediata e incondicionalmente".
Por otro lado, advirtió que "la población civil de toda Gaza corre grave peligro". Asimismo, denunció que desde el inicio de la operación militar israelí contra el enclave palestino "más de 15.000 personas, más del 40 % de las cuales eran niños, han fallecido" y "otros miles han resultado heridos".
Señaló que más de la mitad de las viviendas han sido destruidas y alrededor del 80 % de la población de 2,2 millones se ha visto obligada a desplazarse a zonas cada vez más pequeñas.
Los restos explosivos de los bombardeos israelíes "están haciendo que haya zonas inhabitables", mientras el desplazamiento masivo ha creado "condiciones de hacinamiento, indignas y antihigiénicas". "No existe una protección eficaz de los civiles", lamentó Guterres.
Asimismo, "el sistema sanitario de Gaza está colapsado" y los "hospitales se han convertido en campos de batalla", sostuvo.
Aclaró que en la actualidad solo 14 de los 36 centros médicos funcionan parcialmente, mientras los dos principales hospitales del sur de Gaza funcionan al triple de su capacidad de camas y se están quedando sin suministros básicos y sin combustible, además de albergar a miles de personas desplazadas.
"En estas circunstancias, más personas morirán sin recibir tratamiento en los próximos días y semanas", auguró el alto funcionario, señalando que "ningún lugar es seguro en Gaza".
"La situación se está deteriorando rápidamente en una catástrofe con implicaciones potencialmente irreversibles para los palestinos en su conjunto y para la paz y la seguridad en la región", advirtió el secretario general de la ONU, llamando a prevenir este desenlace "a toda costa".
Recalcó que "la comunidad internacional tiene la responsabilidad de utilizar toda su influencia para evitar una mayor escalada y poner fin a esta crisis".
"Insto a los miembros del Consejo de Seguridad a que presionen para evitar una catástrofe humanitaria. Reitero mi llamamiento a que se declare un alto el fuego humanitario. Es urgente", insistió.
El ministro de Exteriores de Israel, Eli Cohen, reaccionó a la decisión de Guterres asegurando que su desempeño como secretario general de la ONU es un "peligro para la paz mundial". Además, acusó al jefe del organismo internacional de apoyar al movimiento Hamás y los asesinatos de israelíes.
"El mandato de Guterres es un peligro para la paz mundial. Su petición de activar el Artículo 99 y el llamamiento a un alto el fuego en Gaza constituye un apoyo a la organización terrorista Hamás, así como un respaldo al asesinato de ancianos, el secuestro de bebés y la violación de mujeres. Cualquiera que apoye la paz mundial debe apoyar la liberación de Gaza de Hamás", escribió Cohen en su cuenta de X.