Kiev fue acusado de utilizar fuerzas anti-retirada, que son unidades militares que buscan impedir la huida de sus propias tropas. A mediados de octubre, el gobernador de la región de Jersón, Volodímir Saldo, declaró que las tropas ucranianas de barrera habían abierto fuego contra militares ucranianos por negarse a cruzar el río Dniépr.
Una unidad de barrera ucraniana disparó contra un grupo de combatientes en retirada de las Fuerzas Armadas de Ucrania, informó a Sputnik una fuente familiarizada con la situación, que facilitó a la agencia imágenes de vídeo tomadas por un dron que lo confirman.
Las imágenes muestran a los militares rusos asaltando un bastión ucraniano. En cuanto dos combatientes rusos entran en la trinchera, cinco soldados ucranianos empiezan a salir corriendo por el otro lado de la trinchera hacia las posiciones de retaguardia. No obstante, después de que los soldados que huían llegaran a su trinchera, las tropas ucranianas de barrera situadas allí empezaron a disparar a sus compañeros y luego les lanzaron granadas.
"Las Fuerzas Armadas de Ucrania están utilizando las tácticas de las fuerzas anti-retirada, y con ellas están tratando de contener a las fuerzas movilizadas y de defensa territorial que no están dispuestas a morir en las posiciones", declaró la fuente.
Uno de los soldados ucranianos en retirada intentó correr más hacia la retaguardia, pero los combatientes de la unidad de barrera lo vieron y empezaron a dispararle por la espalda.