Ninguna fuerza extranjera manda en Brasil

Al Gobierno brasileño le molestó que los servicios de inteligencia de Israel, Mossad, dijeran el miércoles que ayudaron a frustrar un atentando de Hezbolá en el país sudamericano.
Sin nombrar ni a Israel, ni al Mossad, ni a Hezbolá, el ministro de Justicia de Brasil, Flávio Dino de Castro e Costa, escribió este jueves en su cuenta de X que "ninguna fuerza extranjera manda en la Policía de Brasil" y aseguró que las investigaciones en curso iniciaron "antes del estallido de las tragedias en curso en la escena internacional".
"Apreciamos la adecuada cooperación internacional, pero rechazamos que cualquier autoridad extranjera pretenda dirigir los órganos policiales brasileños o utilizar nuestras investigaciones para hacer propaganda o para sus intereses políticos", sostuvo.
En intercambio posterior con los medios, reiteró que ningún país que coopere con Brasil "puede sustituir a las instituciones brasileñas" y recalcó que la Policía Federal "no admite cualquier tipo de opinión, participación o veredicto sobre sus actos" por parte de terceros, que no sean la cartera de Justicia y Seguridad, a la que está subordinada. 
La víspera, la oficina del primer israelí, Benjamín Netanyahu, publicó un comunicado en X en el que aseguró que el Mossad frustró un atentado terrorista organizado por Hezbolá en suelo brasileño, en cooperación con agencias locales e internacionales. 
"Los servicios de seguridad brasileños, junto con el Mossad y sus socios de la comunidad de seguridad israelí, junto con otras agencias de seguridad internacionales, frustraron un ataque terrorista en Brasil, planeado por la organización terrorista Hezbolá, dirigido y financiado por Irán", reza el mensaje.
El miércoles, la Policía Federal de Brasil informó del despliegue de un operativo para frustrar posibles atentados terroristas en el país, que dejó dos detenidos, y aseguró que los agentes cumplieron 11 órdenes de registro e incautación, sin dar más detalles.
Por su lado, O Globo reportó que los detenidos formaban parte de un grupo financiado por el movimiento Hezbolá, que buscaría atentar contra edificios de la comunidad judía y sinagogas en el país sudamericano.
La ofensiva en Gaza, que ha dejado miles de muertos, ha provocado tensiones entre Israel y varios países latinoamericanos, que han alzado su voz contra Tel Aviv por la ferocidad de sus ataques.
Entretanto, Brasil está intentando negociar una salida segura para unos 30 brasileños que siguen atrapados en Gaza.