El diario español El Mundo reveló el viernes que el ejército israelí inició a contratar a mercenarios extranjeros, muchos de nacionalidad europea, tras sufrir cientos de bajas como consecuencia de la operación sorpresa ‘Tormenta de Al-Aqsa’ lanzada el pasado 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (HAMAS).
Entre los combatientes extranjeros se encuentra un notorio mercenario español, vinculado al movimiento neonazi, que anteriormente luchó en Ucrania y fue visto junto a soldados israelíes en Gaza la semana pasada.
El Mundo habló con el mercenario, identificado como Pedro Díaz Flores, quien dijo que recibe 3900 euros (4187 dólares) por semana por unirse al ejército israelí, en momentos que las tropas israelíes han lanzado una contraofensiva, incluida una limitada incursión terrestre en la Franja de Gaza, para combatir a HAMAS que tiene amplia red de túneles sofisticados y equipados a lo largo y ancho del enclave, suficientes para sorprender al enemigo.
“Entonces vine por economía, por dinero. Pagan muy bien, ofrecen buen equipamiento y el trabajo es tranquilo. Son 3900 euros [4187 dólares] por semana, dejando de lado las misiones complementarias”, dijo Flores sobre sus motivos para unirse a las fuerzas de ocupación.
Sin embargo, Flores insiste en que lucha en los ocupados altos del Golán sirios. “Solo brindamos apoyo de seguridad a los convoyes de armas o a las tropas de las fuerzas armadas israelíes que están en la Franja de Gaza, no luchamos directamente contra HAMAS, ni participamos en operaciones de asalto”, alegó.
Pedro Díaz Flores, primero a la derecha, con algunos compañeros en un 'checkpoint' fronterizo con la Franja de Gaza |
Detalló que él y otros mercenarios extranjeros están “a cargo de la seguridad de los puestos de control y del control de acceso en las fronteras de Gaza y Jordania. Aquí hay muchas PMC [empresas militares privadas] y comparten el trabajo. Tradicionalmente, han vigilado las terminales fronterizas entre Eliat y Aqaba”, añadió
El periódico español publicó en su artículo una imagen de Flores, de 27 años, junto a sus colegas cerca de la Franja de Gaza.
Varios medios informaron el mes pasado que los mercenarios extranjeros estacionados en Ucrania han comenzado a abandonar el país europeo, implicado en guerra con Rusia, para unirse al ejército israelí, mientras que el enfoque del Occidente también ha cambiado, enfocando su ayuda a la entidad sionista, que lleva a cabo desde hace un mes una agresión genocida en Gaza, donde ha matado a cerca de 10 000 civiles.
Pese a su promesa de lanzar una ofensiva terrestre a gran escala en Gaza, el ejército israelí se ha limitado a realizar algunos operativos reducidos, en los que ha perdido decenas de sus uniformados y tanques y vehículos blindados.