El Gobierno de Taiwán promete contraatacar y responder si aviones y barcos de guerra de China entran en sus aguas o espacio aéreo territoriales.
El general Lin Wen-huang, subjefe del Estado Mayor General de Operaciones y Planificación del Ejército taiwanés, ha indicado este miércoles que Taiwán ejercería, sin excepción, su derecho a la autodefensa y el contraataque para las aeronaves y los barcos que ingresan al territorio marítimo y aéreo de la isla.
“Usaremos fuerzas navales y aéreas y fuego costero para rechazar a las fuerzas del EPL [Ejército Popular de Liberación de China] que entren en nuestras zonas de 24 millas náuticas y 12 millas náuticas”, ha afirmado Lin en una rueda de prensa, alertando que, cuanto más cerca de Taiwán sean las maniobras militares de China, “más fuertes serán las contramedidas”.
Según el alto cargo taiwanés, el Ejército de Taiwán ejercería el mismo derecho para “contraatacar” a los aviones no tripulados (drones) de China que no prestan atención a las advertencias de abandonar su territorio.
Estas advertencias se han hecho mientras las Fuerzas Armadas de Taiwán dispararon tiros de advertencia contra un supuesto dron chino que volaba sobre la isla el martes. Más temprano, la presidenta taiwanesa, Tsai Ing-wen, ordenó al Ejército de Taiwán que tomara “fuertes contramedidas” contra lo que denominó provocaciones chinas.
Las tensiones entre China y Taiwán están en su máximo nivel en años, debido a la visita de varias delegaciones extranjeras a la isla desde el principio de agosto. La presidenta de la Cámara de Representantes de EE.UU., Nancy Pelosi, fue la primera en visitar la isla a principios de agosto, y luego otras cuatro delegaciones de alto nivel estadounidenses han viajado a Taiwán.
El senador Ed Markey, llegó a Taiwán el 14 y el 15 de agosto, y el gobernador republicano del estado norteamericano de Indiana, Eric Holcomb, el 21 de agosto. La senadora estadounidense Marsha Blackburn fue la cuarta personalidad política estadounidense en visitar la isla.
La última visita ha sido realizada este mismo miércoles por una delegación encabezada por el gobernador republicano de Arizona, Doug Ducey.
A su vez, China, que reivindica esta isla autónoma como parte integrante de su territorio, se ha comprometido a recuperarla un día, por la fuerza, si es necesario, y ha reaccionado a la llegada de las delegaciones estadounidenses a Taiwán realizando ejercicios militares a gran escala.
Pekín, que se opone a cualquier nexo político entre Washington y Taipéi, así como el suministro de armas estadounidenses a la isla, ha avisado una y otra vez a las autoridades estadounidenses que no envíen señales equivocadas a las fuerzas separatistas para la independencia de Taiwán, de lo contrario deben asumir las consecuencias.