"Según las conclusiones de las pesquisas, los fragmentos hallados en el lugar del suceso (...) son elementos del misil MIM-104A de la batería antiaérea estadounidense Patriot desarrollado por las corporaciones Raytheon y Hughes y producido por Raytheons", señaló la institución en la red social Telegram.
Agregaron que durante el examen del lugar del incidente se encontraron 116 fragmentos de cuerpos y mecanismos de dos misiles, con inscripciones y marcas en inglés, a una distancia de 1,8 kilómetros al noreste y 4,8 kilómetros al sureste del supuesto lugar del ataque aéreo.
Detallaron que se encontraron las siguientes marcas en los fragmentos incautados: "Assy 11455748, Sn740179, Assy 11461343, Sn740206, Assy 11461865, Sn740207, Raytheon, Confidential Classified By Patriot Security Classification Guide Dated: 9/22/83 Addenda Dated 11/28/83 8/8/84 Contract No/Daah01-86c-A018", así como "18876 Assy, Martin Marieta" y "10253043-39 02 S/N 80025".
Además, durante los exámenes periciales, fueron hallados restos de hexógeno, con impurezas de hasta un 10% de octógeno, característico de los explosivos de fabricación fuera de Rusia, declararon desde el Comité de Investigación.
Los rigurosos análisis se llevaron a cabo con la técnica de la espectrometría de movilidad iónica (IMS), cromatografía de gases acoplada a la espectrometría de masas y cromatografía líquida de alta precisión con detector selectivo de masas.
El 24 de enero, el avión de transporte militar ruso Il-76 fue derribado en la región rusa de Bélgorod. A bordo se encontraban 65 militares ucranianos prisioneros para su trasladado e intercambio, además de seis miembros de la tripulación y tres acompañantes. Desde el Ministerio de Defensa ruso calificaron el derribo del Il-76 como "un atentado terrorista del régimen de Kiev". Desde la Cancillería rusa condenaron en los términos más enérgicos el siniestro, calificándolo también de acto terrorista y ataque deliberado por parte del Gobierno del mandatario ucraniano, Volodímir Zelenski.