Lanzan una redada para encontrar a residentes prorrusos en la ciudad de Nikoláev.

La ciudad ucraniana de Nikoláev recurrió este fin de semana a medidas drásticas para encontrar a los llamados "colaboracionistas" y "separatistas", como se refieren a las personas que tienen posturas prorrusas o ayudan a las fuerzas de Moscú de alguna manera, reporta UNIAN.
Así, en la ciudad se impuso un toque de queda desde las 23:00 del 5 de agosto hasta las 5:00 del 8 de agosto. 
Anna Zamazéeva, presidenta del Consejo Regional de Nikoláev, relató que el proceso de la búsqueda de los opositores se divide en tres etapas: "encontrarlos, luego condenarlos y no dejarlos en libertad bajo fianza", ya que los ucranianos están dispuestos a "hacer justicia por mano propia contra ellos", aclaró.
"Todos los afectados, sus vecinos, sus seres queridos y sus familiares, cuyas casas han sido dañadas, cuyas vidas pacíficas han sido destruidas, descargan su ira contra los colaboracionistas", afirmó la funcionaria. 
Zamazéeva explicó que la inspección de los ciudadanos tiene lugar en todas las viviendas de la localidad. "Van directamente a los apartamentos, comprueban cada uno de ellos, revisan los documentos y los teléfonos móviles, lo comprueban todo", indicó. 
"La población está dividida en dos partes: hay quienes han abandonado la región y fueron inspeccionados [...] en los puestos de control. Los que se quedaron están siendo revisados ahora", detalló la presidenta del Consejo Regional de Nikoláev. 
Según Zamazéeva, los residentes tratan con normalidad las inspecciones "porque entienden que se trata de la seguridad continua de toda la ciudad".