Algunos de sus discípulos comenzaron a hablar acerca del majestuoso trabajo hecho en piedra del templo y de las decoraciones conmemorativas que adornaban las paredes.
Pero Jesús les dijo: Viene el tiempo cuando todo esto será demolido por completo. ¡No quedará ni una sola piedra sobre otra!.
Maestro le preguntaron, ¿cuándo sucederá todo eso? ¿Qué señal nos indicará que esas cosas están por ocurrir?
Él les contestó: No dejen que nadie los engañe, porque muchos vendrán en mi nombre y afirmarán: “Yo soy el Mesías” y dirán: “El tiempo ha llegado”. Pero no les crean. Y, cuando oigan de guerras y de levantamientos, no se dejen llevar por el pánico. Es verdad, esas cosas deben suceder primero, pero el fin no vendrá inmediatamente después.