La OPEP no va a ayudar a Occidente aumentando la producción de petróleo

La OPEP no tiene intención de aumentar la producción de petróleo para frenar la subida de los precios de la energía, en medio de las sanciones de Occidente contra Rusia, según reportó este sábado el diario británico The Daily Telegraph, citando fuentes del sector.
En las circunstancias excepcionales, que hay detrás de la actual escalada de precios, se encuentran el inesperado y fuerte repunte de la demanda tras la pandemia, y el desarrollo de la operación militar rusa en Ucrania, según el medio. Esto ha generado que la OPEP, a pesar de las repetidas peticiones de EE.UU., no quiera perjudicarse económicamente aumentando la producción, ya que esto reduciría el precio.
La falta de cooperación de la OPEP con Occidente se debería también, en parte, a que Rusia tiene actualmente una voz en la mesa de la OPEP+, donde el presidente ruso, Vladímir Putin, quiere mantener el suministro lo más ajustado posible, según las fuentes. Además, el hecho de que una gran parte de los suministros de petróleo sauditas se dirijan a China y la India, que adoptaron una postura neutral ante los acontecimientos en Ucrania, complica aún más la situación desde el punto de vista geopolítico, resaltaron.
No hay prácticamente ninguna posibilidad de que la OPEP haga más para ayudar a Occidente a contrarrestar a Rusia, indicó el medio citando a sus fuentes. En cambio, se mantiene al margen, esperando a ver dónde caen las fichas, agregó.
Sin embargo, también aclara que cualesquiera que sean las exigencias del Kremlin en la OPEP+, quizá, no hubieran importado tanto de no ser por el fuerte deterioro de las relaciones de Washington con la familia real saudita desde que Joe Biden asumió la Presidencia.
En el 2019 Biden, aún siendo candidato, prometió convertir a Arabia Saudita en un "paria" de la escena mundial, tras el escándalo por el asesinato del periodista opositor saudita Jamal Khashoggi.
Finalmente, el diario también subraya que los intentos de la Casa Blanca de restablecer el acuerdo nuclear con Irán, así como la política del Gobierno estadounidense de cambiar a fuentes de energía renovables, tampoco han sido muy bien recibidos en Arabia Saudita. A raíz de todo esto, hay quienes dicen que las relaciones entre Riad y Washington nunca han sido tan malas.