La nueva relación: El Espíritu Santo mora en el cristiano

El tercer aspecto de la Nueva Relación, que pasa a ser inmediatamente nuestro cuando aceptamos a Cristo como Salvador, es que Dios, el Espíritu Santo" mora en nosotros.
Joe 2:28  »Entonces, después de hacer todas esas cosas, derramaré mi Espíritu sobre toda la gente. Sus hijos e hijas profetizarán. Sus ancianos tendrán sueños y sus jóvenes tendrán visiones.
Joe 2:29 En esos días derramaré mi Espíritu aun sobre los sirvientes, hombres y mujeres por igual.
Así lo profetizó el Antiguo Testamento.
Jua 14:16 Y yo le pediré al Padre, y él les dará otro Abogado Defensor,* quien estará con ustedes para siempre.
Jua 14:17 Me refiero al Espíritu Santo, quien guía a toda la verdad. El mundo no puede recibirlo porque no lo busca ni lo reconoce. Pero ustedes sí lo conocen, porque ahora él vive con ustedes y después estará en ustedes.
Jua 7:38 ¡Todo el que crea en mí puede venir y beber! Pues las Escrituras declaran: “De su corazón, brotarán ríos de agua viva”».
Jua 7:39 (Con la expresión «agua viva», se refería al Espíritu, el cual se le daría a todo el que creyera en él. Pero el Espíritu aún no había sido dado, porque Jesús todavía no había entrado en su gloria).
Jua 16:7 Pero, en realidad, es mejor para ustedes que me vaya porque, si no me fuera, el Abogado Defensor no vendría. En cambio, si me voy, entonces se lo enviaré a ustedes.
Hch 1:5 Juan bautizaba con* agua pero, en unos cuantos días ustedes serán bautizados con el Espíritu Santo».
Así lo prometió Cristo.
Mat 3:11 »Yo bautizo con agua a los que se arrepienten de sus pecados y vuelven a Dios, pero pronto viene alguien que es superior a mí, tan superior que ni siquiera soy digno de ser su esclavo y llevarle las sandalias. Él los bautizará con el Espíritu Santo y con fuego.
Así habló Juan el Bautista sobre Cristo .
Hch 2:1 El día de Pentecostés, todos los creyentes estaban reunidos en un mismo lugar.
Hch 2:2 De repente, se oyó un ruido desde el cielo parecido al estruendo de un viento fuerte e impetuoso que llenó la casa donde estaban sentados.
Hch 2:3 Luego, algo parecido a unas llamas o lenguas de fuego aparecieron y se posaron sobre cada uno de ellos.
Hch 2:4 Y todos los presentes fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en otros idiomas,* conforme el Espíritu Santo les daba esa capacidad.
Hch 2:5 En esa ocasión, había judíos devotos de todas las naciones, que vivían en Jerusalén.
Hch 2:6 Cuando oyeron el fuerte ruido, todos llegaron corriendo y quedaron desconcertados al escuchar sus propios idiomas hablados por los creyentes.
Hch 2:7 Estaban totalmente asombrados. «¿Cómo puede ser? —exclamaban —. Todas estas personas son de Galilea,
Hch 2:8 ¡y aún así las oímos hablar en nuestra lengua materna!
Hch 2:9 Aquí estamos nosotros: partos, medos, elamitas, gente de Mesopotamia, Judea, Capadocia, Ponto, de la provincia de Asia,
Hch 2:10 de Frigia, Panfilia, Egipto y de las áreas de Libia alrededor de Cirene, visitantes de Roma
Hch 2:11 (tanto judíos como convertidos al judaísmo), cretenses y árabes. ¡Y todos oímos a esta gente hablar en nuestro propio idioma acerca de las cosas maravillosas que Dios ha hecho!».
Hch 2:12 Quedaron allí, maravillados y perplejos. «¿Qué querrá decir esto?», se preguntaban unos a otros.
Hch 2:13 Pero otros entre la multitud se burlaban de ellos diciendo: «Sólo están borrachos, eso es todo».
Hch 2:14 Entonces Pedro dio un paso adelante junto con los otros once apóstoles y gritó a la multitud: «¡Escuchen con atención, todos ustedes, compatriotas judíos y residentes de Jerusalén! No se equivoquen.
Hch 2:15 Estas personas no están borrachas, como algunos de ustedes suponen. Las nueve de la mañana es demasiado temprano para emborracharse.
Hch 2:16 No, lo que ustedes ven es lo que el profeta Joel predijo hace mucho tiempo:
Hch 2:17 “En los últimos días —dice Dios—, derramaré mi Espíritu sobre toda la gente. Sus hijos e hijas profetizarán. Sus jóvenes tendrán visiones, y sus ancianos tendrán sueños.
Hch 2:18 En esos días derramaré mi Espíritu aun sobre mis siervos —hombres y mujeres por igual —y profetizarán.
La promesa y la profecía se cumplen - después que Cristo ha muerto, resucitado y ascendido a los cielos.
Hch 2:38 Pedro contestó: —Cada uno de ustedes debe arrepentirse de sus pecados y volver a Dios, y ser bautizado en el nombre de Jesucristo para el perdón de sus pecados. Entonces recibirán el regalo del Espíritu Santo.
Rom 8:9 Pero ustedes no están dominados por su naturaleza pecaminosa. Son controlados por el Espíritu si el Espíritu de Dios vive en ustedes. (Y recuerden que los que no tienen al Espíritu de Cristo en ellos, de ninguna manera pertenecen a él).
1Jn 4:13 Y Dios nos ha dado su Espíritu como prueba de que vivimos en él y él en nosotros.
Desde Pentecostés, todos los cristianos están habitados por el Espíritu Santo. Tan pronto como una persona acepta a Cristo por Salvador, el Espíritu pasa a morar en ella.
Hch 10:44  Mientras aún hablaba Pedro estas palabras, el Espíritu Santo cayó sobre todos los que oían el discurso. 
Un ejemplo en la iglesia primitiva, tan pronto como ellos aceptaban a Cristo como Salvador, el Espíritu Santo descendía sobre ellos.
1Co 3:16  ¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros?
El Espíritu Santo mora en todos aquellos que han aceptado a Cristo como Salvador.
1Co 6:19  ¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros,(C) el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? 
El cuerpo del creyente es el Templo del Espíritu Santo. El Templo de Jerusalén fue destruido unos pocos años después que esto fue escrito. Los cuerpos de los creyentes son ahora templo de Dios.
2Ti 1:14  Guarda el buen depósito por el Espíritu Santo que mora en nosotros. 
El Espíritu Santo mora en el cristiano 
Algunos ejemplos de la actividad del Espíritu Santo: 
Jua 16:8  Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio. 
El censura al mundo por su pecado. Entre otras cosas, la vida del cristiano debería censurar al mundo por sus pecados .
Jua 3:5  Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios. 
Jua 3:6  Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es. 
La regeneración es obra de su poder.
Jua 15:16  No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé. 
Jua 16:14  El me glorificará; porque tomará de lo mío, y os lo hará saber. 
Hch 5:32  Y nosotros somos testigos suyos de estas cosas, y también el Espíritu Santo, el cual ha dado Dios a los que le obedecen. 
El dará testimonio de Cristo.
1Co 12:4  Ahora bien, hay diversidad de dones, pero el Espíritu es el mismo. 
1Co 12:13  Porque por un solo Espíritu fuimos todos bautizados en un cuerpo, sean judíos o griegos, sean esclavos o libres; y a todos se nos dio a beber de un mismo Espíritu. 
Efe 2:22  en quien vosotros también sois juntamente edificados para morada de Dios en el Espíritu.
Edifica la Iglesia (aquellos que son realmente cristianos) haciendo de ella un todo bien equilibrado y coordinado.
2Co 13:14  La gracia del Señor Jesucristo, y el amor de Dios, y la comunión del Espíritu Santo sea con todos vosotros. Amén.
El Espíritu Santo trata con el cristiano y le comunica los beneficios de la redención.
Jua 14:16  y yo rogaré al Padre, y Él os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre: 
Jua 14:17  El Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; mas vosotros le conocéis; porque está con vosotros, y morará en vosotros. 
Jua 14:18  No os dejaré huérfanos; vendré a vosotros. 
Rom 8:9  Mas vosotros no estáis en la carne, sino en el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, el tal no es de Él. 
Rom 8:10  Y si Cristo está en vosotros, el cuerpo a la verdad está muerto a causa del pecado; pero el Espíritu vive a causa de la justicia. 
Rom 8:11  Y si el Espíritu de Aquél que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros; el que levantó a Cristo de entre los muertos, vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros. 
Cuando el Espíritu Santo mora en nosotros, Cristo mora en nosotros.
Jua 14:26  Mas el Consolador, el Espíritu Santo, al cual el Padre enviará en mi nombre, Él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que os he dicho. 
Jua 15:26  Pero cuando viniere el Consolador, al cual yo os enviaré del Padre, el Espíritu de verdad, el cual procede del Padre, Él dará testimonio de mí. 
Jua 16:17  Entonces algunos de sus discípulos dijeron entre ellos: ¿Qué es esto que nos dice: Un poco, y no me veréis; y otra vez, un poco, y me veréis, y: Porque yo voy al Padre? 
Hch 9:31  Entonces las iglesias tenían paz por toda Judea, y Galilea, y Samaria, y eran edificadas, andando en el temor del Señor; y fortalecidas por el Espíritu Santo se multiplicaban. 
El Espíritu Santo que mora en nosotros es el Consolador del cristiano.
Jua 14:26  Mas el Consolador, el Espíritu Santo, al cual el Padre enviará en mi nombre, Él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que os he dicho. 
Jua 16:13  Mas cuando viniere el Espíritu de verdad, Él os guiará a toda verdad; porque no hablará de sí mismo, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que han de venir. 
1Co 2:12  Y nosotros hemos recibido, no el espíritu del mundo, sino el Espíritu que es de Dios, para que conozcamos lo que Dios nos ha dado; 
1Co 2:13  lo cual también hablamos, no con palabras que enseña la humana sabiduría, sino con las que enseña el Espíritu Santo, acomodando lo espiritual a lo espiritual. 
Heb 10:15  Y el Espíritu Santo también nos da testimonio; porque después que había dicho: 
Heb 10:16  Éste es el pacto que haré con ellos: Después de aquellos días, dice el Señor: Daré mis leyes en sus corazones, y en sus mentes las escribiré; 
1Jn 2:20  Mas vosotros tenéis la unción del Santo, y conocéis todas las cosas. 
1Jn 2:27  Pero la unción que vosotros habéis recibido de Él permanece en vosotros, y no tenéis necesidad de que alguien os enseñe; sino que como la unción misma os enseña acerca de todas las cosas, y es verdadera, y no es mentira, y así como os ha enseñado, vosotros permaneceréis en Él. 
El Espíritu Santo es nuestro Maestro: especialmente para abrir nuestras mentes para comprender la Biblia.
Hch 1:8  mas recibiréis poder cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo; y me seréis testigos, a la vez, en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra. 
El Espíritu Santo es la fuente de poder del cristianismo.
Luc 12:11   Y cuando os trajeren a las sinagogas, y a los magistrados y potestades, no os preocupéis de cómo o qué hayáis de responder, o qué hayáis de decir; 
Luc 12:12   porque el Espíritu Santo os enseñará en la misma hora lo que debéis de decir. 
El Espíritu Santo da al cristiano las palabras precisas en tiempo de persecución.
Rom 5:5  y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos es dado.  
Rom 14:17  Porque el reino de Dios no es comida ni bebida; sino justicia, y paz, y gozo en el Espíritu Santo. 
Rom 15:13  Y el Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer, para que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo. 
1Ts 1:6  Y vosotros vinisteis a ser seguidores de nosotros y del Señor, recibiendo la palabra en medio de mucha tribulación, con gozo del Espíritu Santo; 
Gál 5:22  Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, 
Gál 5:23  mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley. 
El Espíritu Santo que mora en el cristiano le da las gracias del amor, la alegría, la paz, la esperanza la resignación, etc .

La gran distinción de un verdadero cristiano
es que mora en él el Espíritu. jQué cuidadoso
deberá ser, para que nada en sus pensamientos
o sentimientos sea ofensivo a su divino huésped!
DR. CHARLES HOOGE

Esta nueva relación con el Dios Trino y Uno es, por lo tanto, la segunda de las bendiciones de la salvación. Esta nueva relación es triple:
1) Dios Padre es el Padre del cristiano.
2) El único hijo engendrado por Dios es nuestro Salvador y Señor. nuestro Profeta, Sacerdote y Rey. Nosotros estamos identificados y unidos con El y así recibimos la adopción de hijos.
3) El Espíritu Santo vive en nosotros y trata con nosotros. El nos comunica los múltiples beneficios de la redención .