Rusia ha marcado un ultimátum a los nacionalistas y mercenarios para que entreguen sus armas y salgan de Mariúpol, este de Ucrania.
El jefe del Centro de Gestión de la Defensa Nacional ruso, el coronel general Mijaíl Mizintsev, llamó el domingo a los nacionalistas, así como a las unidades de las Fuerzas Armadas de Ucrania y de la llamada Defensa Territorial a deponer las armas y a salir de Mariúpol.
“En ese caso, la salida organizada de la ciudad se efectuará de la siguiente forma: de 10 a 12 horas todas las unidades armadas de Ucrania y los mercenarios extranjeros sin armas y municiones (podrán abandonar la localidad) por una ruta acordada con Ucrania”, detalló Mizintsev.
El militar ruso acusó a los nacionalistas ucranianos de provocar una grave catástrofe humanitaria en Mariúpol. “Desesperados y fuera de sí, los bandidos, al darse cuenta de que es imposible que Kiev les preste ayuda, han sembrado el terror en masa en los barrios de la ciudad que aún controlan. Al mismo tiempo, la información fiable que recibimos evidencia las horribles atrocidades de los milicianos enloquecidos por desesperación”, denunció.
Además, señaló que, a partir de las 11:00 (hora local) de este lunes, se llevará ayuda humanitaria a Mariúpol, donde al menos 130 000 civiles y 184 extranjeros se mantienen como “rehenes” de los batallones nacionalistas que controlan esta ciudad.
El mando castrense exhortó al Gobierno ucraniano a revocar las instrucciones anteriores en las que exigen a los militantes a sacrificarse y a convertirse en “mártires de Mariúpol” y dijo que Moscú espera, hasta las 05:00 de este lunes la respuesta oficial de Kiev sobre la evacuación propuesta para Mariúpol.
En la madrugada de este lunes, la viceprimera ministra de Ucrania, Irina Vereshchuk, ha rechazado la propuesta rusa y asegurado que las fuerzas ucranianas permanecerán en la ciudad portuaria estratégica de Mariúpol.
Desde el inicio de la operación militar especial rusa en Ucrania, bajo los órdenes del presidente ruso, Vladimir Putin, el Gobierno ruso ha dejado claro en reiteradas ocasiones que no busca ocupar el país vecino, y su misión en Ucrania es la “desmilitarización” y “desnazificación” de Ucrania y evitar que EE.UU. y otros Estados conviertan a Ucrania en una base antirrusa.