El Ministerio de Salud de Yemen cataloga la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como “cómplice de los crímenes” de Arabia Saudí y sus aliados.
Tal como ha publicado este domingo la cadena local de televisión Al-Masirah, el portavoz de la Cartera yemení, Anis al-Asbahi, ha recalcado que el sector de la salud necesita más de 6 millones de litros de diésel para reactivar hospitales, plantas de la producción de oxígeno, y otros centros relacionados.
El funcionario ha precisado que cortes de suministro de combustible necesario han provocado el cierre de muchas salas de hospitales, como las de hemodiálisis, de cirugía y unidades de cuidados intensivos neonatales.
Al respecto, ha denunciado que “2000 niños necesitan equipo respiratorio y sus vidas corren peligro debido a que la coalición saudí impide el ingreso de combustible”.
Al-Asbahi ha instado a las organizaciones internacionales a desempeñar un papel humanitario y presionar a los países agresores para que pongan fin al bloqueo de combustible.
También, ha pedido la reapertura del aeropuerto de Saná y el puerto de Al-Hudayda (oeste) para la llegada de medicamentos y equipos médicos y que los pacientes puedan viajar al extranjero para recibir tratamiento.
El vocero ha enfatizado que el Ministerio de Salud está en contacto con organizaciones internacionales y les ha avisado sobre la situación médica catastrófica en el país árabe. “Han sido testigos de la situación catastrófica durante siete años y no hemos visto ninguna acción responsable”, ha censurado.
El bloqueo, junto con la campaña militar que lidera Riad desde 2015, ha sumergido al país más pobre del mundo árabe en una fuerte crisis. La piratería marítima, según los responsables yemeníes, impide que los buques petroleros entreguen el combustible a Yemen, dejando a los hospitales, las estaciones de bombeo de agua, las panaderías y las gasolineras en una situación precaria.
Las autoridades yemeníes denuncian que las Naciones Unidas tienen un enfoque unilateral respecto a Yemen y que ignoran la situación humanitaria en este país. De hecho, acusan al organismo internacional de cerrar los ojos ante los crímenes que cometen Arabia Saudí y sus aliados contra los yemeníes.