Y salieron los fariseos y comenzaron a discutir con él, pidiéndole un signo del cielo, con el fin de ponerle a prueba. Dando un profundo gemido desde lo íntimo de su ser, dice:
¿Por qué esta generación pide un signo? Yo os aseguro: no se dará a esta generación ningún signo. Y, dejándolos, se embarcó de nuevo, y se fue a la orilla opuesta.
¿Por qué esta generación pide un signo? Yo os aseguro: no se dará a esta generación ningún signo. Y, dejándolos, se embarcó de nuevo, y se fue a la orilla opuesta.