Pekín ha rechazado este jueves las acusaciones presentadas por Washington sobre supuestos ataques informáticos, afirmó el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Wang Wenbin, en una rueda de prensa.
"China se opone firmemente y toma medidas enérgicas contra cualquier forma de ciberataque de conformidad con la ley. Estados Unidos llegó a una conclusión injustificada y generó calumnias infundadas contra China. Es una acción extremadamente irresponsable y constituye una completa distorsión de los hechos", señaló el vocero.
Además, tachó al propio país norteamericano de ser "el origen y el mayor perpetrador de ciberataques". Así, añadió que "el Comando Cibernético de EE.UU. enumera descaradamente la infraestructura crítica de otros países como objetivos legítimos para los ataques cibernéticos estadounidenses".
Según Wang, las agencias de ciberseguridad de Pekín han publicado informes "uno tras otro" revelando los ataques informáticos de larga duración del Gobierno de EE.UU. a la infraestructura crítica de China.
"Estas políticas y prácticas irresponsables ponen en gran riesgo la infraestructura crítica del mundo. Instamos a Estados Unidos a poner fin a su ciberespionaje y sus ciberataques a escala global y a dejar de difamar a otros países con la excusa de la ciberseguridad", declaró el funcionario.
Los comentarios se produjeron tras el anuncio de este miércoles por parte del Departamento de Justicia de EE.UU. en el que aseguró haber eliminado a una red de bots responsable del secuestro de "cientos" de rúteres domésticos y de pequeñas empresas a través de un programa malicioso elaborado por los piratas informáticos "patrocinados por el Gobierno chino".