Una investigación realizada por científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT, de EE.UU.) sugiere que la Tierra cuenta con un mecanismo de "retroalimentación estabilizadora" que actúa durante cientos de miles de años, fundamentalmente para mantener las temperaturas globales dentro de un rango estable.
Según explica la institución, desde hace años existe la hipótesis de que la estabilización climática ha sido producto de un proceso geológico conocido como 'meteorización por silicatos', a través del cual las rocas de ese material extraen el dióxido de carbono de la atmósfera y lo trasladan a sedimentos oceánicos. Sin embargo, no existía evidencia contundente que soportara esta propuesta.
Con el fin de identificar un patrón característico que arrojara luz sobre los procesos que han controlado la temperatura planetaria durante las distintas etapas geológicas, los investigadores aplicaron la teoría de las ecuaciones diferenciales estocásticas para analizar datos paleoclimáticos de los últimos 66 millones de años, recopilados a partir del estudio de la composición química de antiguos fósiles, conchas marinas y núcleos de hielo antártico.
Como resultado, descubrieron que las fluctuaciones de temperatura se estabilizan aproximadamente cada 100.000 años, un fenómeno que no ocurriría si no existiera un mecanismo subyacente. Asimismo, demostraron que los periodos de estabilización climática se corresponden con los del proceso de meteorización de silicatos.
Las conclusiones obtenidas, publicadas este miércoles en la revista Science Advance, son las primeras que sustentan, a partir del análisis de evidencia concreta, la existencia de un proceso de retroalimentación estabilizadora, impulsado por la absorción del carbono de las rocas de silicato.
Entender cómo se estabiliza el clima de la Tierra en escalas de tiempo geológicas es un asunto importante, señalan los autores, para comprender las consecuencias a largo plazo del cambio climático causado por las actividades antropogénicas y su efecto sobre la habitabilidad del planeta.