"Vistos con luz ultravioleta, estos parches oscuros en el Sol se conocen como agujeros coronales y son regiones donde el viento solar rápido brota hacia el espacio", detalló la agencia espacial. Esos torrentes de material solar pueden surgir a una velocidad de hasta 2,9 millones de kilómetros por hora.
El aspecto oscuro de estos agujeros que formaron en el Sol una cara sonriente obedece a que esos espacios tienen menor temperatura y densidad que las regiones de plasma a su alrededor.
Como la Tierra se encuentra en la línea de las corrientes de viento solar, se espera que esas estas puedan tener impacto en el planeta. Por eso, el Servicio Nacional de Meteorología de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica de EE.UU. (NOAA, por sus siglas en inglés) emitió una alerta de tormenta geomagnética de categoría G1 para este sábado 29 de octubre.
Ese fenómeno tiene la capacidad para causar fluctuaciones menores en las redes eléctricas y aumentar la actividad de las auroras en los polos.
