“A día de hoy, Estados Unidos ha subordinado prácticamente a todo Occidente, movilizándolo para convertir a Ucrania en un instrumento de guerra contra Rusia, como en su momento Hitler alzó en armas a la mayoría de países de Europa para atacar a la Unión Soviética”, ha dicho.
Hablando ante la Duma Estatal, la Cámara Baja del Parlamento ruso, sobre la ratificación de los tratados de anexión de cuatro regiones ucranianas a Rusia, Lavrov ha subrayado que EE.UU., está apoyando a los “descendientes y seguidores de los secuaces nazis” con el fin de intensificar el conflicto en Ucrania.
Ha defendido también la operación militar rusa, iniciada el 24 de febrero, para después asegurar que a diferencia de EE.UU. y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) que atacaron a los países bastante lejos de sus fronteras y los destruyeron como Yugoslavia, Irak y Libia, la Federación Rusa puso en marcha su operación en los territorios ucranianos para defender su frontera, su patria, y su pueblo.
Desde el inicio de la operación militar especial rusa, el Kremlin ha dejado claro que el objetivo de su misión es la “desmilitarización” y la “desnazificación” de Kiev y que Rusia no tiene planes para ocupar el país vecino alertando que las potencias occidentales están usando a Ucrania para invadir su territorio.
En este marco, los aliados occidentales de Ucrania, liderados por EE.UU., siguen suministrando armas a Ucrania y continúan con este enfoque en lo que va del inicio de la operación militar rusa. A su vez, Moscú ha advertido que Occidente está “echando leña al fuego” del conflicto y que sus medidas “tendrán repercusiones trágicas”.
