“Respeto todas las creencias, pero mi fuerza es mi fe en Cristo, la oración y la lectura diaria de la Biblia”, ha señalado Vujicic. En su parlamento, ha remarcado la centralidad de la fe en su vida. “He descubierto que mi mayor incapacidad es mi incredulidad”, ha señalado. Y también ha explicado que tiene guardados en su armario un par de zapatos, “por si Dios hace crecer las piernas”. “He descubierto que si Dios no hace el milagro que espero, ¡yo puedo ser el milagro!”, ha añadido.
Aunque Vujicic ha hablado desde Madrid, las iglesias evangélicas en toda España han podido seguir su conferencia a través de alguno de los 2.500 puntos de retransmisión en directo que se han habilitado. Según la organización, la media de personas conectadas en cada punto ha sido de unas 15. También se han desplazado hasta la capital cientos de personas para participar en el evento.
Como viene siendo habitual en sus conferencias, Vujicic ha remarcado su imagen de líder vulnerable y dependiente de Dios. “Todos tenemos altibajos en la vida. Hace dos años pasé un tiempo de depresión. Necesité ayuda psicológica. Pero tengo fe; no me rindo porque Dios está conmigo”, ha asegurado.
Además, ha hecho un llamado a experimentar la fe cristiana y conocer a Jesús por medio de ella. “Muchas personas sufren depresión porque no conocen el propósito de sus vidas”, ha señalado. “Dios te ama tal como eres y tiene un propósito para tu vida”, ha añadido.
El acto se ha realizado en el Palacio de Congresos IFEMA, en Madrid, que según la organización ha completado prácticamente su aforo. También han participado el grupo IMPACT, el rapero Joanarmand, el grafitero Seth Vañó y Sal150. Vujicic continuará ahora su gira por el continente europeo.
Nacido en Australia en 1982, sin brazos ni piernas (síndrome de tetra-amelia), Nick Vujicic sufrió bullying siendo niño y en su desesperación, entre los 8 y los 10 años de edad, intentó el suicidio. Sin embargo, en un proceso de transformación personal extraordinario, Nick Vujicic se ha convertido en un ejemplo de superación que hoy inspira al mundo con su testimonio y sus ganas de vivir. Sus conferencias en países de los cinco continentes congregan a multitudes para escucharle, para verle y, muchos, para recibir su singular abrazo.
Nick Vujicic trae un mensaje de esperanza que creemos muy oportuno para este tiempo de postpandemia y sus preocupantes secuelas en la salud mental de las personas, especialmente entre la juventud. Un mensaje impactante que será de ayuda a cualquiera que esté sufriendo discapacidad física o emocional, con desilusión, vacío y falta de propósito en la vida.
