"Es esencial seguir eliminando todos los obstáculos remanentes a la exportación de fertilizantes rusos y sus ingredientes, incluyendo el amoníaco", afirmó el funcionario en la apertura del debate general del 77 periodo de sesiones de la Asamblea General del foro mundial.
Asimismo, expresó su preocupación sobre el impacto de los altos precios del gas en la producción de fertilizantes de nitrógeno, subrayando que esto podría tener efectos negativos en el suministro mundial de alimentos.
"Esto debe ser abordado de forma seria. Sin una acción ahora, la escasez mundial de fertilizantes rápidamente se transformará en una escasez mundial de alimentos", alertó.
El 22 de julio, Rusia, Ucrania y Turquía firmaron una iniciativa, auspiciada por la ONU, que abre un corredor marítimo humanitario para barcos que zarpen con alimentos y fertilizantes desde puertos del mar Negro.
Tres centrales marítimas ucranianas clave, Odesa, Chornomorsk y Yuzhne, fueron desbloqueadas y pudieron retomar las exportaciones.
El Centro de Coordinación Conjunta, con sede en Estambul, tiene la misión de supervisar la implementación de la iniciativa, garantizando que los barcos de carga no lleven artículos o personal no autorizado.
La iniciativa se basa en dos documentos: el primero, un memorándum, estipula la obligación de la ONU de remover varias restricciones a las exportaciones de productos agrícolas y fertilizantes rusos hacia los mercados internacionales, y el segundo define pautas para la venta de productos agrícolas de Ucrania desde los puertos bajo su control.
Moscú señala que el memorándum todavía no está funcionando como se esperaba.