Uniper, la principal empresa importadora de gas natural ruso a Alemania, ha solicitado la ayuda del Gobierno Federal ante la "extrema presión financiera" que sufre, según se desprende de un comunicado publicado este viernes por la compañía matriz finlandesa Fortum.
"Uniper ha sido la [empresa] más afectada por el recorte de gas ruso y, como resultado, está bajo la extrema presión financiera. Desde mediados de junio, Uniper ha recibido solo el 40 % de los volúmenes contratados desde Rusia y ha tenido que adquirir cantidades de reemplazo en el mercado a precios considerablemente más altos", señalan desde Fortum.
La empresa también informó que están en el proceso de "negociaciones constructivas" con el Gobierno alemán en búsqueda de una solución para "estabilizar Uniper, tanto a nivel de riesgos empresariales como su posición financiera", ya que de esto depende la seguridad de los suministros gasísticos al país. Una de las opciones consideradas incluye una reorganización del portfolio empresarial de Uniper para "para proteger las empresas alemanas críticas para el sistema bajo la propiedad del Gobierno alemán".
Por otra parte, desde Fortum saludaron los esfuerzos legislativos aprobados esta semana por el Parlamento alemán, que otorgan al Ejecutivo de una serie de herramientas regulatorias para estabilizar las compañías energéticas a corto plazo y responder también a "desafíos estructurales" a largo plazo.
El gigante energético ruso Gazprom redujo el suministro en junio, citando un problema técnico relacionado con la devolución de una turbina fabricada por Siemens Energy del gasoducto Nord Stream 1. La pieza en cuestión está siendo reparada en las instalaciones de la sucursal canadiense de Siemens en Montreal.
La devolución se ha visto entorpecida por las sanciones antirrusas de Canadá en respuesta al operativo militar de Moscú en Ucrania, ya que las restricciones prohíben la exportación de ciertos bienes y tecnologías a Rusia. Este viernes, se reportó que los Gobiernos de Canadá y de Alemania estarían a punto de llegar a un acuerdo para devolver dicho dispositivo, lo que permitirá aumentar el bombeo de gas a Europa. Por su parte, desde Ucrania esperan que sus socios cumplan plenamente con el régimen de las sanciones.