El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, instó a China a abandonar sus reclamaciones sobre el mar de la China Meridional y a aceptar una sentencia territorial de 2016 a favor de Filipinas, y advirtió que Washington estará obligado a defender a su aliado del Pacífico en caso de un "ataque armado" en aguas en disputa, informa AP.
En un comunicado difundido este martes por la Embajada estadounidense en Manila, el alto funcionario declaró que el gigante asiático debe "cumplir con sus obligaciones en virtud del derecho internacional y cesar su comportamiento provocador". En ese orden, citó la decisión de un tribunal de arbitraje de La Haya que invalidó las amplias reclamaciones de Pekín sobre la región.
"Reafirmamos que un ataque armado contra las fuerzas armadas filipinas, los buques públicos o las aeronaves en el mar de la China Meridional, invocaría los compromisos de defensa mutua de Estados Unidos", en virtud de un tratado de defensa firmado en 1951 por ambas naciones, indicó Blinken.
Por su parte, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Wang Wenbin, calificó la decisión del tribunal de "ilegal, nula y sin efecto", al tiempo que afirmó que Washington ha utilizado el fallo para "abrir una brecha entre los países de la región y socavar la paz y la estabilidad".
"China no lo acepta ni reconoce, y nunca aceptará ninguna reclamación o acción basada en ese laudo. Al hacerlo, estamos defendiendo el estado de derecho internacional", subrayó este miércoles durante una conferencia de prensa. Además, instó a EE.UU. a que "respete la soberanía, los derechos y los intereses de China en el mar de la China Meridional, deje de provocar problemas y deje de utilizar la cuestión del mar de la China Meridional para sembrar la discordia".
A su vez, el secretario de Exteriores de Filipinas, Enrique Manalo, consideró el fallo "indiscutible",y afirmó que el recién elegido Gobierno nacional insistirá en su cumplimiento.
"Estas decisiones ya no están al alcance de la negación y la refutación. Son concluyentes, por ser indiscutibles. El laudo es definitivo", manifestó en un comunicado. "Rechazamos firmemente los intentos de socavarlo [...] incluso de borrarlo de la ley, la historia y nuestra memoria colectiva", añadió, sin nombrar directamente a China.
Pekín no participa desde 2016 en el tribunal, que terminó poniéndose del lado de Manila después que esta impugnara las reclamaciones chinas sobre el mar. Varias otras naciones, como Vietnam, Brunei y Malasia, también mantienen reclamaciones conflictivas en la región.
Desde que el presidente estadounidense, Joe Biden, asumió su cargo el año pasado, el Pentágono ha realizado travesías navales casi mensualmente por el mar de la China Meridional, incluido el disputado estrecho de Taiwán, desplegando diversos buques de guerra en la zona a pesar de las repetidas advertencias de Pekín. Una de las incursiones se produjo este miércoles. China afirmó entonces que "expulsó" a un destructor estadounidense de misiles guiados que "invadió ilegalmente las aguas territoriales chinas".