De acuerdo al comunicado oficial, las medidas punitivas se introdujeron contra las compañías que ayudaban a comercializar productos petroquímicos iraníes en el extranjero, concretamente a clientes de la República Popular China y del resto de Asia oriental. Se precisa que las entidades que entraron en la lista negra echaban una mano a la parte iraní para "realizar transacciones internacionales y evadir las sanciones".
Las sanciones también afectaron al ciudadano chino Jinfeng Gao y al ciudadano indio Mohammed Shaheed Ruknooddin Bhore.
A consecuencia, todas las propiedades, así como los intereses en la propiedad de las empresas y personas sancionadas, que se encuentren bajo la jurisdicción estadounidense, quedan bloqueados. Por otro lado, aquellas personas o instituciones financieras extranjeras que realicen transacciones con ellas también pueden resultar sujetas a las penalizaciones.
"EE.UU. está siguiendo el camino de la diplomacia significativa para lograr un retorno mutuo al cumplimiento del Plan de Acción Integral Conjunto. En ausencia de un acuerdo, continuaremos utilizando las sanciones para limitar las exportaciones de petróleo, productos derivados del petróleo y productos petroquímicos de Irán", afirmó el subsecretario del Tesoro para Terrorismo e Inteligencia Financiera, Brian E. Nelson, agregando que Washington "continuará exponiendo las redes que utiliza Irán para ocultar actividades con el fin de evadir las sanciones".
