La Vía Láctea alberga millones de planetas potencialmente habitables, y aproximadamente cuatro de ellos podrían hospedar civilizaciones alienígenas hostiles que invadirían la Tierra si pudieran, sugiere una investigación.
El estudio se centró en las probabilidades de que los humanos puedan contactar algún día con una civilización alienígena hostil capaz de invadir nuestro planeta.
Para resolver la tarea, el autor de la investigación, Alberto Caballero, estudiante de doctorado en resolución de conflictos de la Universidad de Vigo (España) analizó la historia de los enfrentamientos bélicos en la Tierra para después extrapolar la probabilidad de que nosotros, como civilización humana, ataquemos o invadamos un exoplaneta habitado y evaluar de esta manera la prevalencia de civilizaciones extraterrestres hostiles.
Caballero contó primero el número de países que invadieron otros países entre 1915 y 2022. Descubrió que un total de 51 de las 195 naciones del mundo habían lanzado algún tipo de invasión durante ese periodo. EEUU encabezó la lista, con 14 invasiones en ese periodo. Después, evaluó la probabilidad de que cada país lanzara una invasión en función de su porcentaje del gasto militar mundial. En este caso, EEUU también ocupó el primer puesto con el 38% del gasto militar mundial.
Luego, Caballero sumó la probabilidad individual de cada país de instigar una invasión, y luego dividió la suma por el número total de países en la Tierra, terminando con lo que él describe como "la probabilidad humana actual de invasión de una civilización extraterrestre".
Según este modelo, las probabilidades actuales de que los humanos invadan otro planeta habitado son del 0,028%.
Sin embargo, escribió Caballero, esa probabilidad se refiere al estado actual de la civilización humana, ya que todavía no somos capaces de realizar viajes interestelares. Si el ritmo actual de avance tecnológico se mantiene, el viaje interestelar no sería posible hasta dentro de 259 años, según calculó Caballero utilizando la escala de Kardashev, un sistema que clasifica el grado de avance de una civilización en función de su gasto energético.
Suponiendo que la frecuencia de las invasiones humanas continúe disminuyendo durante ese tiempo al mismo ritmo que las invasiones han disminuido durante los últimos 50 años, entonces la raza humana tiene una probabilidad del 0,0014% de invadir otro planeta cuando nos convirtamos potencialmente en una civilización interestelar, dentro de 259 años.
Esto puede parecer una probabilidad muy pequeña, hasta que se empieza a multiplicar por los millones de planetas potencialmente habitables de la Vía Láctea. Según cálculos previos, hasta 15.785 civilizaciones alienígenas podrían compartir teóricamente la Vía Láctea con los humanos.
De esta manera, menos de una de las civilizaciones capaces de viajar entre estrellas —el 0,22, para ser exactos— sería hostil hacia los humanos que establecieran contacto. Sin embargo, el número de vecinos maliciosos aumenta a 4,42 si se tienen en cuenta las civilizaciones que, como los humanos modernos, aún no son capaces de realizar viajes interestelares, explicó.
Sin embargo, Caballero indicó que la probabilidad de que los humanos contacten con una de estas civilizaciones maliciosas —y luego sean invadidos por ellas— es increíblemente pequeña.
"La probabilidad de una invasión extraterrestre por parte de una civilización a la que enviemos un mensaje al planeta es aproximadamente de dos órdenes de magnitud inferior a la probabilidad de una colisión de asteroides asesinos de planetas", escribió, añadiendo que tales asteroides, como el que condenó a los dinosaurios, son eventos de 1 en 100 millones de años.
El científico admitió que su modelo tiene limitaciones y representa más bien un experimento mental.
"Hice el trabajo basándome solo en la vida tal y como la conocemos. No conocemos la mente de los extraterrestres", concluyó.