Ucrania reclama al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) la expulsión de Rusia o realizar reformas que permitan superar el derecho a veto de Moscú.
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha exigido este martes ante las Naciones Unidas la expulsión de Rusia del CSNU bajo acusaciones de “crímenes de guerra”, días después de la difusión de una serie de publicaciones gráficas de los cadáveres de civiles en las calles de Bucha, una ciudad recién liberada a 37 kilómetros al noroeste de Kiev, capital ucraniana.
En declaraciones ofrecidas por videoconferencia, el mandatario ucraniano ha instado al Consejo de Seguridad a adoptar de manera inmediata reformas internas para eliminar el poder de veto de los cinco miembros permanentes que incluyen a Rusia, China, EE.UU., El Reino Unido y Francia para garantizar una “representación justa”.
Las declaraciones del mandatario ucraniano han llegado mientras CSNU debido al derecho de veto de los países con asiento permanente en el organismo, ha sido incapaz de aprobar una sola resolución sobre el conflicto de Ucrania.
“¿Dónde está la seguridad que debe garantizar el Consejo de Seguridad? Aunque hay un Consejo de Seguridad, no hay paz. Entonces, ¿dónde está esta paz?”, se ha quejado ante las Naciones Unidas.
De hecho, ha instado al organismo a que tome medidas inmediatas ante “crímenes de guerra más horribles desde la Segunda Guerra Mundial” de Rusia en Ucrania.
En este marco, ha reiterado la incapacidad de las Naciones Unidas para cumplir con sus obligaciones subrayando que “si esto continúa, los países confiarán únicamente en el poder de sus propias fuerzas para asegurar su seguridad y no en la ley internacional o las instituciones internacionales”.
A su vez, el Gobierno ruso, rechaza tales acusaciones contra las tropas rusas por violación de derechos humanos durante su operativo militar en Ucrania, subrayando que las fotos de civiles muertos a tiros en Bucha son un “ataque de falsificaciones” que usa Kiev para culpar de esos crímenes a las fuerzas rusas.