El ministro israelí de asuntos militares asevera que la situación de seguridad de este régimen se ha deteriorado debido a las recientes operaciones palestinas.
“Estamos en un período difícil de ataques, una realidad que no se puede aceptar, y estamos trabajando para enfrentarla con fuerza”, dijo el sábado Benny Gantz, según informa la agencia palestina de noticias Maan.
Gantz también afirmó que el régimen de Tel Aviv no aceptará que se produzcan ataques en su contra, por lo tanto, las autoridades de seguridad competentes están considerando las posibles medidas a tomar contra el pueblo palestino durante el mes de Ramadán, noveno mes del calendario lunar.
Del mismo modo, el ministro israelí recurrió al deterioro de la situación de seguridad en los territorios ocupados palestinos como un pretexto para hacer caso omiso a la crisis económica que vive Palestina.
Tal y como sostuvo Gantz, no es posible implementar medidas destinadas a mejorar la vida y la economía en la ocupada Cisjordania y la asediada Franja de Gaza, en coordinación con la Autoridad Nacional Palestina (ANP), en medio del deterioro de la seguridad.
Las tensiones han venido agudizándose en los territorios palestinos ocupados en vísperas del inicio del sagrado mes de Ramadán. El pasado jueves, las fuerzas del ejército israelí atacaron la ciudad de Yenín, causando la muerte a tiros de dos palestinos y heridas a otros 15.
Las fuerzas israelíes han intensificado sus ataques represivos después de la operación heroica realizada el pasado martes por un palestino en la ciudad israelí de Bnei Brak, al este de Tel Aviv, en los territorios ocupados palestinos, que dejó cuatro sionistas muertos. El atacante palestino, identificado como Diaa Hamarsheh, de 26 años, de la aldea de Yabed (norte de Cisjordania), fue asesinado por las fuerzas del régimen.