Liberación de Marib es un punto de inflexión para Yemen

Un miembro del Consejo Político Supremo de Yemen, Muhamad al-Bajiti, en declaraciones hechas este martes a la cadena libanesa Al-Mayadeen, ha señalado que el liderazgo de la coalición saudí está en la provincia de Marib (centro-oeste), y todas sus operaciones se llevan a cabo desde allí; por lo tanto, la liberación de Marib es un objetivo tan importante que incluso constituye un punto de inflexión para Yemen.
“La liberación de Marib tendrá efectos significativos en la expulsión de las fuerzas de ocupación y la restauración de la riqueza petrolera”, ha asegurado Al-Bajiti y ha agregado que pronto habrá una gran escalada de indignación del pueblo yemení contra las fuerzas lideradas por la coalición saudí.
El miembro del movimiento popular yemení Ansarolá ha recalcado que el dominio aéreo de la coalición liderada por Arabia Saudí no durará mucho, puesto que, ha enfatizado, Ejército yemení y los comités populares continúan mejorando sus capacidades militares.
Ha señalado asimismo que el equilibrio de poder se inclina a favor de Yemen y entrará en una nueva fase que será la fase del colapso del enemigo, vaticina Al-Bajiti.
El funcionario yemení ha subrayado que “la iniciativa de Saná todavía está sobre la mesa”, y ha aconsejado a Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos (EAU) que “aprovechen rápidamente esta oportunidad y logren la paz”, porque los objetivos de Yemen ahora siguen siendo defensivos, pero pueden cambiar, avisa.
Las declaraciones de Al-Bajiti se producen después de que el Ejército yemení y los comités populares lanzaron la misma jornada una operación denominada “Operación Fajar al-Entesar” (Amanecer de la Victoria) y pudieron liberar un área de 600 kilómetros cuadrados en la provincia de Marib durante esta operación.
Además, algunos medios locales informan que las fuerzas yemeníes han retomado el control del distrito de Al-Yuba durante sus avances en la estratégica provincia de Marib.
En momentos en que más zonas caen en manos de las fuerzas yemeníes, la única opción que le queda a Arabia Saudí y sus aliados es rendirse y responder a la demanda de levantar el bloqueo aéreo, marítimo y terrestre que ha impuesto a Yemen desde hace casi siete años.