El domingo por la noche se produjeron nuevos ataques en una aldea del norte, donde personas no identificadas quemaron hasta 26 casas de hindúes a pesar de la advertencia del gobierno de que tales ataques serían castigados con firmeza.
El lunes, estudiantes y profesores de la Universidad de Dhaka se unieron a los seguidores del grupo hindú Sociedad Internacional para la Conciencia de Krishna para bloquear una intersección importante en Dhaka para exigir justicia. Varios otros grupos hindúes también se unieron a la protesta pacífica en la intersección de Shahbagh.
Los ataques a los templos hindúes se han intensificado desde el miércoles pasado después de que se publicara una foto en las redes sociales que mostraba una copia del libro sagrado del Islam, el Corán, a los pies de una estatua en un templo hindú en el distrito oriental de Cumilla.
Los medios locales informaron que seis hindúes murieron en ataques separados, pero las cifras no se pudieron confirmar de forma independiente. Los medios locales minimizaron su cobertura de la violencia, aparentemente bajo la presión del gobierno para controlar cualquier nuevo ataque mientras los hindúes celebraban su festival religioso más grande, Durga Puja, que terminó el viernes.
Los musulmanes también realizaron protestas callejeras después de que las imágenes aparecieran en las redes sociales, especialmente en Facebook.
Asif Hasan, administrador principal del gobierno del distrito norteño de Rangpur, dijo el lunes que los atacantes incendiaron las casas de los hindúes en un pueblo de pescadores el domingo por la noche. También robaron dinero en efectivo, ganado y otros objetos de valor durante el ataque, dijo. Hasan dijo que 42 personas fueron arrestadas.
El lunes, el Ministerio del Interior trasladó a siete agentes de policía de zonas conflictivas por no controlar la violencia.
Aproximadamente el 9% de los 160 millones de habitantes de Bangladesh son hindúes. Bangladesh sigue un sistema legal en gran parte secular basado en el derecho consuetudinario británico.
