"Seguimos con extrema preocupación los dramáticos acontecimientos en Siria", destacaron desde la Cancillería rusa. Según el organismo, Bashar al Assad decidió "renunciar a la presidencia y abandonar el país, dando instrucciones para llevar a cabo una transferencia de poder de manera pacífica".
En este contexto, el ministerio instó "a todas las partes implicadas para que renuncien al uso de la violencia y resuelvan todas las cuestiones de gobernanza por medios políticos", al tiempo que aseguró estar en contacto con todos los grupos de la oposición siria.