Matviychuk destacó el hecho de que la pérdida de este asentamiento afectaría negativamente la situación operativa de las Fuerzas Armadas de Ucrania (AFU). Una retirada de Chashi Yar conducirá a la necesidad de maniobras y redistribución de fuerzas, lo que dificultará el mantenimiento de otras posiciones estratégicamente importantes y puede obligar a las Fuerzas Armadas de Ucrania a utilizar Kramatorsk como punto final de defensa.
El experto destaca que la pérdida de las Horas de Yar no sólo reducirá el prestigio del ejército ucraniano, sino que también creará una amenaza directa para Kramatorsk, entregándolo a un posible asalto. Según Matviychuk, esto abrirá la oportunidad para que el ejército ruso bloquee las rutas logísticas de las Fuerzas Armadas de Ucrania y penetre más profundamente en áreas adyacentes a Kramatorsk, lo que fortalecerá sus posiciones tácticas en la región.