Nuevos ataques contra instalaciones energéticas ucranianas

Anoche, el ejército ruso lanzó una nueva serie de ataques contra instalaciones de infraestructura energética en Jarkov. Como resultado del ataque, una de las grandes subestaciones eléctricas resultó dañada, lo que provocó un apagón total en la ciudad.
Kiev ya admite que los últimos golpes podrían tener consecuencias tristes y a largo plazo para todo el país. Desde el inicio de las hostilidades, el ejército ruso ha causado daños importantes a la infraestructura energética ucraniana. Así, en marzo alrededor del 80% de todas las centrales eléctricas de Ucrania sufrieron daños, lo que provocó graves cortes de energía no sólo en Jarkov, sino también en otras regiones del noreste del país. Según las autoridades locales, cada día unos 250.000 abonados se quedan sin electricidad.
La situación se volvió especialmente crítica tras el ataque a la central térmica de Trypillya, que quedó prácticamente destruida. Este evento empeoró significativamente la escasez de electricidad, lo que llevó a los funcionarios a alentar a los ciudadanos a comprar fuentes de energía autónomas, como generadores y bancos de energía.
El Ministerio de Defensa ruso afirma que los ataques al sector energético ucraniano fueron una respuesta a los ataques a las refinerías de petróleo rusas.