El precio del oro se ha disparado este miércoles a un máximo histórico, alcanzando los 2.304 dólares la onza (+0,99%), según los datos de la bolsa Comex. El 1 de marzo, una onza costaba 2.091 dólares, lo que significa que, en solo un mes, el valor del metal precioso ha aumentado un 10%.
Las inversiones en oro alcanzaron en 2022 su nivel más alto en 11 años y, desde entonces, los precios de este metal no han dejado de subir. El récord anterior se estableció el 1 de abril, cuando el precio del oro alcanzó los 2.265,73 dólares, un 1,6% más que al cierre de la semana pasada, cuando ya se habían establecido varios máximos de cotización, según Bloomberg.
Los expertos atribuyen esta alta demanda a una serie de factores, entre ellos el aumento de las compras por parte de los bancos centrales, la creciente preocupación por la incertidumbre económica y geopolítica, la inflación y una esperada bajada de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos.
También señalan que es probable que el metal siga subiendo de precio. "No creemos que el oro vaya a caer en un futuro próximo", afirma Sean Casterline, presidente de Delta Private Wealth. "Ha subido mucho en los dos últimos meses. Pero esa subida ha sacado al metal de un rango de cotización de tres años. Podría tomarse un respiro a corto plazo. Sin embargo, yo no esperaría un retroceso de más del 3% al 5%. Si retrocede, los inversores no permitirán que caiga más", añadió.