La III Guerra Mundial puede comenzar en Oriente Medio

El presidente de Bielorrusia, Alexánder Lukashenko, considera que el conflicto en Oriente Medio puede dar inicio a una Tercera Guerra Mundial, si Israel y EE.UU. "comienzan a batallar con Irán". "Puede librarse desde allí", opinó este viernes en respuesta a una pregunta periodística.
El mandatario se preguntó, dirigiéndose virtualmente a los líderes estadounidenses e israelíes, si tienen pruebas de que Irán esté involucrado en los ataques palestinos contra el territorio de Israel. Si hay pruebas, dijo, que las "pongan en la mesa", para que la comunidad internacional las vea. "Nadie ha presentado reclamos a Irán con base en hechos", afirmó.
"Dicen que misiles y drones de fabricación iraní vuelan en Palestina", afirmó Lukashenko. "Pero sus drones vuelan asimismo en Ucrania. Existe el comercio de armas. Eso está mal, pero es legal".
El líder bielorruso dijo a continuación que Hamás podía haber comprado los misiles disparados "de terceras manos". Mientras tanto, afirmó, "¡cuántas armas han llegado allí desde Ucrania!". Se puede ver en las fotos el número de fusiles estadounidenses incautados tras las incursiones de Hamás, destacó el político, porque "están todos contabilizados y han llegado y siguen llegando desde Ucrania" y se conocen las vías de ese suministro. "De ahí, un grave revoltijo", resumió.
Lukashenko vaticinó que si EE.UU. despliega en el Mediterráneo sus portaviones o grupos navales y empieza a bombardear "a algunos países, especialmente Irán, Irak, le contestarán y (…) hundirán el portaviones". A su juicio, "será un desastre". Según el presidente bielorruso, "hay muchas cosas que muestran que puede desatarse un conflicto muy grave o quizás una guerra con uso de armas más serias".
Lukashenko admite que "nadie sabe cómo van a desarrollarse los acontecimientos", y que incluso los estadounidenses desconocen qué consecuencias tendrá lo que iniciaron. En los ataques de las milicias chiitas contra las bases estadounidenses en Siria y otros países de la región, Lukashenko ve unas advertencias: "No somos los mismos que fuimos hace 10 años".
El mandatario bielorruso intuye que la inestabilidad regional forma parte de los esfuerzos, por parte de EE.UU., de sembrar caos y encender guerras para "mantenerse de pie" y "conservar la posición predominante en el mundo" ante cambios internacionales en curso que no le convienen.