De acuerdo con el portavoz de las FDI, Jonathan Conricus, "lo que Hezbolá ha hecho en los últimos días es escalar la situación". "Está jugando un juego muy, muy peligroso. Están escalando la situación. Cada día vemos más y más ataques", declaró este domingo.
Afirmó que Hezbolá "está arrastrando al Líbano a una guerra en la que no ganará nada, pero en la que puede perder mucho". En este sentido Conricus preguntó si el país árabe "está realmente dispuesto a poner en peligro lo que queda de la prosperidad y la soberanía libanesas por el bien" de Hamás. "Esa es una pregunta que las autoridades libanesas deben hacerse y responder", subrayó.
En los últimos días los intercambios de ataques entre las FDI y Hezbolá se han intensificado. Así, este sábado, la parte israelí publicó un video que muestra un ataque contra el sitio desde el que el movimiento chiita lanzó un misil antitanque hacia la localidad de Margaliot, ubicada en el norte de Israel.
Por su parte, el subjefe de Hezbolá, el jeque Naim Kassem, declaró el mismo día que la organización ya está influyendo en el curso del conflicto entre Tel Aviv y Hamás al mantener tres divisiones del Ejército israelí desplegadas en la frontera con el Líbano en lugar de prepararse para luchar en la Franja de Gaza. "¿Cree que, si intenta aplastar la resistencia palestina, otros combatientes de la resistencia en la región no actuarán? Hoy estamos en el corazón de la batalla", aseguró.
Esta semana Politico ha informado que Hamás y Hezbolá están coordinando estrechamente sus próximos pasos en la lucha contra Israel y planean abrir un segundo frente en el Líbano.