La Justicia estadounidense afirmó además que el Gobierno de Estados Unidos obtuvo una orden judicial a principios de este año para incautar la carga.
El pasado 19 de abril, Suez Rajan se declaró culpable de violar las sanciones estadounidenses contra Irán y fue sentenciado a pagar una multa de 2,5 millones de dólares.
La compañía Navegación del Imperio, propietario del buque cisterna en el que se encontraba la carga, también tuvo que transportar el petróleo incautado —que entonces se encontraba en el sureste de Asia— a Estados Unidos por su propia cuenta.
Previamente, el Cuerpo de Guardianes de Irán reaccionó al incidente, lanzando una rotunda advertencia a EE.UU. sobre el petróleo iraní incautado. “Responsabilizamos tanto a Estados Unidos, como a cualquier firma que pretenda descargar nuestra carga de crudo de este buque tanque [Suez Rajan]”, avisó el 20 de julio el comandante de la Fuerza Naval del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán, el contraalmirante Alireza Tangsiri.
Pocos días después de la incautación de Suez Rajan, la Armada de Irán se apoderó de un petrolero con bandera de las Islas Marshall en el mar de Omán, bautizado como Advantage Sweet, que transportaba petróleo kuwaití para la segunda compañía energética más grande de Estados Unidos.
El buque tanque, que había zarpado desde Kuwait rumbo a Texas, en Estados Unidos, chocó con un barco iraní en el Golfo Pérsico e intentó huir del lugar, en grave violación de las leyes y reglamentos internacionales.
El petróleo iraní confiscado permaneció varado frente a costas de EE.UU. durante varios meses porque nadie se atrevía a comprarlo, a pesar de la luz verde de Washington.
Por fin, el Suez Rajan comenzó la transferencia de la carga de un barco a otro el pasado 21 de agosto. Los documentos judiciales recientemente publicados confirman que el Gobierno estadounidense luego se apoderó del petróleo iraní.
El Gobierno iraní, a su vez, convocó en protesta al encargado de negocios de Suecia, que representa los intereses estadounidenses en Teherán, y le advirtió de que la violación de los intereses de la nación iraní no quedará sin respuesta.
Estados Unidos y sus aliados han estado confiscando cargamentos de petróleo iraní desde que la anterior Administración estadounidense de Donald Trump se retiró unilateralmente del acuerdo nuclear de 2015 en mayo de 2018 y reimpuso todas las sanciones antiraníes que se habían levantado en virtud del pacto.
